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sábado, 23 de noviembre de 2024 11:28h.
NO SOBRAN LAS PALABRAS.-Óscar Mendoza
Óscar Mendoza es licenciado en filología francesa, profesor de secundaria y, como suele decir él, gomero antes que nada.
NO SOBRAN LAS PALABRAS.-Óscar Mendoza

Óscar Mendoza es licenciado en filología francesa, profesor de secundaria y, como suele decir él, gomero antes que nada.

Opinión

El miedo y la esperanza

“El miedo y la esperanza vendrán. Se quedarán durante algún tiempo y sólo deseo que no haya tragedias dentro de esos locos bajitos. Asumo mi responsabilidad de trabajador público y asumo el riesgo, incluso el que me puede ser letal. Pero no podría asumir ver a unos padres que dejan de serlo ante una situación excepcional que podría haber sido mejor gestionada.”
Opinión

La Salud y la vuelta al cole

“Mucha gente, en un espacio bastante reducido, durante muchas horas al día. Puede ser la tormenta perfecta y el caldo de cultivo ideal para seguir coqueteando con la tragedia. Se imponen unas medidas generosas y alabadas por científicos, alejándose del criterio mercantil que tanto daño nos ha hecho. Es cierto que es difícil tomar decisiones cuando se ocupa un puesto de poder y de gestión, pero hay que obrar en conciencia y pensar en los ciudadanos. Si yo estuviera ahí y me obligaran a tomar medidas contra la más mínima lógica, dimitiría ipso facto, regate necesario cuando tienes la dignidad por bandera y no dependes de la política para vivir.”
Opinión

Un paseo por Agulo

“Sonrisas que algunas veces acaban en risas, bebidas que apenas duran en una competencia feroz por ver quién paga la siguiente. Se deslizan bromas y anécdotas, pequeños piques en la forma de entender la vida, incluso alguna diferencia política bien traída y mejor aceptada por todos. La amistad y el aprecio están por encima de todo.”
Opinión

La muerte y Marsé

“Ahí, ya podré irme y él seguirá su viaje, acertando en sus decisiones o pagando un precio por ellas, haciendo de su  vida lo que él quiera hacer y sabedor de que su padre, con sus defectos y flaquezas, siempre lo amó e intentó que fuera una buena persona. Todo lo demás carece de importancia.”
Opinión

Las ilusiones tranquilas

“La ilusión de viajar, de leer, de conocer, de conversar, de vivir, fue mi timón en las numerosas dudas que te asaltan cuando eres joven. Sabía lo que quería porque sabía exactamente lo que no quería, dejándome llevar por lo que sentía en cada momento, arrastrado a la felicidad o a la tristeza como consecuencia de mis acciones.”
Opinión

La sonrisa y la mirada

“Pero hay también algo terapéutico. Esa sonrisa lanzada hacia el que lleva tres días sin ver la luz porque un problema pesa más que su alma, esa mirada de gratitud hacia el que no se siente lo suficientemente valorado, ese tiempo dedicado con generosidad hacia aquél que ha perdido la fe en el ser humano, todo ello puede ser la medicina salvadora para el que sufre un día sí y otro también. Y no cuesta nada, no nos cuesta nada, no debe costarnos nada, sólo ser amable y amar un poco a los demás. Creo que el Nazareno decía algo parecido a eso.”
Opinión

La diferencia española

“Ahora, muchos años después, el tiempo nos ha cambiado, pero no tanto. Vivimos una tragedia que parece ir a menos y que nos ha dado un patada en el culo, lanzándonos hacia algo nuevo donde la seguridad parece una virtud del pasado. La lucha contra el virus tiene su extrapolación en la arena política donde ese odio del que les hablaba al principio brilla en su actualización 2020.”
Opinión

Elogio de la responsabilidad

“El triunfo colectivo depende de la responsabilidad de cada uno, dijo hace mucho Alejandro Magno, antes de afrontar una batalla en la que, al menos, ellos veían venir al enemigo de frente y no de forma invisible como ahora. El hombre sigue librando batallas, continúa peleando por lo justo o lo que no lo es, aunque el escudo y la espada hayan sido sustituidos por una mascarilla y un buen lavado de manos.”
Opinión

Lo personal y lo colectivo

“España, a lo largo de su historia, ha pagado muy caro esta postura maniquea y cainita donde el que piensa diferente no suma, sino que resta y, por ende, deber ser apartado. Los dados del destino, quizás, hace tiempo que juegan la partida mundial y nuestro país parece que ha perdido. Todo pinta bastos y los ases guardados no son tantos como quisiéramos.”