EQUO-La Palma denuncia la nefasta gestión del servicio de limpieza del Parque Nacional de la Caldera
La formación política EQUO-La Palma denuncia la pésima gestión que se está llevando del servicio de limpieza del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente por parte del Gobierno de Canarias.
Desde el pasado día 26 de octubre, el Parque Nacional de la Caldera de Taburiente no cuenta con servicio de recogida de basuras ni de limpieza, una situación que también afecta a las instalaciones propias del Parque (Centro de Visitantes, Centro de Servicios de Taburiente y Aula de la Naturaleza de El Riachuelo).
El pasado día 25 de octubre expiraba el contrato a la empresa que venía prestando dicho servicio. Ésta venía arrastrando dificultades económicas y acumulando deudas a sus trabajadores. La nueva empresa, elegida en concurso público, debía comenzar su actividad el día 26 de octubre y cumplir con la obligación de contratar (subrogar) al personal de la anterior concesionaria y asumir las deudas pendientes.
El desencuentro entre la nueva empresa y la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad, donde se encuadra este Parque Nacional, parece que está en que la primera no desea asumir las deudas que arrastraba la empresa saliente, quedando por este motivo el servicio paralizado.
Desde EQUO-La Palma queremos denunciar el desatino que supone esta paralización del servicio, entre otras cosas porque se quedan en la calle seis trabajadores.
Para evitar la acumulación de basuras, se ha producido el cierre temporal del Centro de Visitantes. Únicamente permanece abierta la recepción. “Queda claro que, si no se llega a una rápida solución, en pocos días se producirán problemas de higiene en las instalaciones del Parque. Además la proliferación de basuras en el territorio del Parque Nacional pronto será una realidad y el daño a la imagen sostenible y turística de la isla será irreparable”, destaca la formación ecosocial.
Recordemos que la gestión de los Parques Nacionales canarios, entre los que se encuentra la Caldera de Taburiente, fue transferida del Estado a la Comunidad Autónoma de Canarias el día 1 de enero de 2010. Desde entonces la gestión de estos espacios protegidos ha sido lamentable y el caso de La Caldera es una muestra de ello.
Para EQUO-La Palma resulta manifiesta la incompetencia de los responsables políticos para llevar a cabo una gestión mínimamente satisfactoria en este ámbito y pone en tela de juicio la capacidad del Gobierno regional para asumir una competencia tan fundamental para el turismo y el medio ambiente de las Islas como es la gestión de sus Parques Nacionales.