El sindicato CNT ha interpuesto demanda por despido nulo en los juzgados de lo social de Santa Cruz de Tenerife en representación de su afiliada Inma Évora, conocida activista social tinerfeña, miembro de la Plataforma de Afectados/as por la Hipoteca (PAH) contra Cáritas Diocesana de Tenerife, al entender que con el despido se han vulnerado derechos fundamentales de la trabajadora.

La carta de despido recibida mediante burofax el día 12/12/2017, argumenta como presuntas faltas graves la pertenencia de la trabajadora al “(…) Consejo Insular de Vivienda, a la coordinadora de mesas de trabajo de intermediación hipotecaria y personas sin hogar, DESC-Canarias, y la Plataforma de Afectados/as por la Hipoteca (PAH) (...)”.

Asimismo, la empresa reseña que la trabajadora participó en diversos actos como manifestaciones convocadas por la PAH, programas de televisión en calidad de invitada para hablar sobre diversas cuestiones de índole social y humanitaria. Ninguno de los argumentos esgrimidos en la carta de despido se corresponde con faltas tipificadas como sancionables en el convenio colectivo aplicado por la empresa.

La trabajadora fue contratada por Cáritas Diocesana de Tenerife para desarrollar y dinamizar el proyecto Base 25 dada su experiencia y destrezas en la intervención social adquiridas desde su voluntariado en la PAH y en diversas plataformas sociales, que además surge de la relación establecida anteriormente en el propio ámbito del Consejo Insular de Vivienda del Cabildo de Tenerife del que la activista ya formaba parte desde el año 2015 y para el que había desarrollado el diseño de funcionamiento de una Oficina de Intermediación y diversos protocolos de actuación entre administraciones públicas, juzgados y entidades financieras para la prevención e intervención en casos de desahucios que Cáritas asumió como suyos durante el desarrollo del mismo.

Las discrepancias surgen durante la ejecución del proyecto ante los criterios que Cáritas aplica a la hora de seleccionar los usuarios del mismo que deja fuera a quienes más lo necesitan y condiciona la ayuda a la firma de un contrato de intervención social interesada, dentro de su propia red de recursos financiados con dinero público, entre otros que a su juicio discriminan a determinados perfiles de personas y familias. Ahora, los hechos que motivaron su contratación, son los mismos, esgrimidos por la empresa para proceder a su despido. La CNT, inicia campaña informativa sobre las repercusiones que puede tener en la vida laboral el activismo social realizado de manera voluntaria. Algo que puede sentar precedentes si este despido no es denunciado.

José Antonio Suárez Morales - Secretariado de acción sindical CNT