Comercio destina 500.000 euros a la rehabilitación de los mercados municipales de Altavista y El Puerto
La Consejería de Turismo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias destinará 500.000 euros a la rehabilitación de los mercados municipales de Altavista y El Puerto, en Las Palmas de Gran Canaria, de acuerdo con lo trasladado este lunes, en un encuentro telématico, por el director general de Comercio, David Mille, al concejal de Turismo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Pedro Quevedo, en la que se acordó iniciar los proyectos.
Esta subvención nominada a la Corporación local forma parte de la estrategia de potenciación de los ‘Mercados tradicionales de Canarias’, una marca registrada por el Gobierno de Canarias como paraguas para la promoción y el impulso de los mercados de las Islas.
El Departamento que dirige Yaiza Castilla tiene como objetivo, a través de esta marca, rentabilizar la imagen de espacios tradicionales y de proximidad que siempre han tenido de cara a los consumidores y, que se refleja en factores como su identificación, como garantía de calidad, su trato personalizado y su contacto directo con el entorno rural y urbano.
En la reunión, el Ayuntamiento se comprometió a comenzar a trabajar en los proyectos de rehabilitación para estos dos espacios de compra de la ciudad, dentro del compromiso de ambas instituciones de dinamizar la oferta y promover un mayor consumo en los mismos.
El director general de Comercio, David Mille, señala que “los mercados municipales son un signo de identidad de la estructura comercial tradicional de nuestra comunidad”, y apunta que “la figura del mercado municipal necesita apostar por un proceso evolutivo que le ayude a avanzar en nuevos conceptos sin llegar a perder sus señas de identidad tradicionales”.
La recuperación, mantenimiento y promoción de los tradicionales mercados es un objetivo que el Gobierno de Canarias tiene dentro de su política comercial, considerando estos espacios como un formato comercial diferenciador que integra las costumbres de una sociedad que evoluciona, pero que valora sus tradiciones.