Cruz Roja está presente este verano en 22 playas de la provincia tinerfeña

Los servicios de vigilancia, salvamento y socorrismo de la Institución cuentan para ello con más de 120 profesionales, entre socorristas acuáticos, personal sanitario, conductores, etc.

La presencia de Cruz Roja en las playas supone un importante valor añadido, el compromiso de la Organización con la seguridad y la calidad en la atención a las personas, porque no se limita a prestar un servicio, sino que va más allá, según explican desde la Organización. Hay que destacar que el dispositivo de Playas de Cruz Roja cuenta además con las Certificaciones de Calidad en playa ISO 9001 y de Gestión Ambiental ISO 14001.

La principal novedad este año del Plan de Playas de Cruz Roja es que su personal, ante el actual contexto originado por la COVID-19, podrá apoyar y llevar a cabo labores de ordenación de las playas, siempre en coordinación con los distintos ayuntamientos, con el fin de contribuir a la seguridad y al buen funcionamiento de los servicios.

El Plan de Contingencia frente a la COVID-19 establecido por Cruz Roja recoge estas nuevas funciones, que convierten al personal de la Organización en 'agentes de sensibilización frente al virus', contribuyendo a la difusión de consejos y mensajes de prevención, o apoyando en el mantenimiento de la distancia social o de los aforos establecidos en los distintos espacios. Además, contempla protocolos específicos de seguridad para el personal de la Organización.

Por otro lado, el uso de nuevas aplicaciones con acceso a la información en tiempo real sobre el estado de las playas (banderas, posibles riesgos, ocupación, etc.) suponen una mejora para el disfrute de las mismas.

Cambian algunas cosas, pero se mantienen las máximas que Cruz Roja aplica desde hace más de 60 años en las playas en las que presta servicio, prevenir accidentes y salvar vidas, indica el portavoz.

En este nuevo contexto marcado por la COVID-19, Cruz Roja aporta sus servicios sociosanitarios en 36 zonas de baño de toda Canarias. En concreto, en la provincia de Santa Cruz de Tenerife la Institución está presente en 22 playas y pìscinas, para velar por la seguridad y la salud de los bañistas, 17 de ellas en Tenerife, 2 en La Palma, 2 en La Gomera y 1 en El Hierro. Estos servicios se prestan de forma ininterrumpida todo el año en las playas de Las Teresitas (S/C de Tenerife), Puerto Naos (Los Llanos de Aridane), El Médano, El Chinchorro, Leocadio Machado y La Tejita y Montaña Roja (Granadilla). Mientras que

Asimismo, durante el periodo estival la Institución aumenta considerablemente sus recursos habituales, los horarios, días y lugares de cobertura, a fin de atender el incremento de los bañistas.

 

Para ello, Cruz Roja cuenta con un equipo compuesto por más de 120 personas contratadas, entre socorristas, médicos, enfermeros, conductores, trabajadores sociales, etc., y otros muchos voluntarios y voluntarias que potencian el servicio y realizan actividades complementarias que le dan un valor añadido a esta prestación. Asimismo, dispone de una gran cantidad de recursos materiales, como puestos de socorro, sillas de vigilancia, embarcaciones, motos acuáticas, quads, ambulancias, diverso material para el rescate (latas, tubos de rescate, aros salvavidas, bolsas de rescate, material de inmovilización acuática, tableros espinal), material de comunicaciones (emisoras portátiles), material de primeros auxilios, desfibriladores semiautomáticos, etc.

 

A esta labor, se suman las asistencias sociales a través de dispositivos para facilitar el baño adaptado de las personas con discapacidad o movilidad reducida. Durante este verano, la Institución ofrece este servicio en 10 zonas de baño de esta provincia. Para ello, se dispone de sillas y andadoras anfibias, muletas y chalecos salvavidas, entre otros recursos. Un total de 1.851 personas pudieron beneficiarse de este servicio el año pasado.

 

En la temporada pasada, Cruz Roja en la provincia tinerfeña llevó a cabo 1.324 asistencias sanitarias, siendo las principales causas por picaduras, esguinces, luxaciones, erosiones, lipotimias, golpes de calor, etc. También destacaron las asistencias sociales, a través de los dispositivos de baño adaptado, las actividades de ocio y tiempo libre con mujeres e infancia, y las acciones de medio ambiente y de sensibilización para la prevención de accidentes en el medio acuático.

 

Apuesta por la prevención

 

Con una dilatada experiencia de más de seis décadas, Cruz Roja, además de contar con este amplio despliegue de recursos humanos y materiales, pone mucho esfuerzo en la prevención, con el fin de lograr que las personas mantengan actitudes seguras, evitando posibles riesgos y accidentes como las insolaciones, quemaduras solares, ahogamientos, golpes de calor, cortes de digestión o lesiones producidas por animales marinos.

 

Asismimo, el componente medioambiental también es una característica intrínseca del Programa de Playas de la Organización. Tanto la gestión de los residuos que genera en su labor diaria en las playas, como la vigilancia y defensa del entorno, son parte clave de su intervención.