Leo con sorpresa en ese supuesto artículo que, además de rezumar prejuicios y mal gusto, contiene determinadas afirmaciones carentes de veracidad y que no se ajustan a la realidad por lo que les realizo las siguientes puntualizaciones:

Aprobé las oposiciones de Letrado interino del Consejo Consultivo en febrero de 1991 y con carácter definitivo a finales de 1992. Es falso, pues, que haya sido Secretario General antes de sacar las oposiciones definitivamente porque no fue hasta 1996 cuando fui nombrado para tal puesto por el Pleno de ese órgano.

Lo ocupé hasta el año 2000, cuando fui nombrado asesor de Adán Martín, entonces Vicepresidente del Gobierno de Canarias. Paulino Rivero fue Presidente en 2007, y fue entonces cuando me nombró Secretario General de la Presidencia del Gobierno.

Un Letrado reclamó patrimonialmente contra el Consejo Consultivo por supuesto mobbing y en primera instancia un Tribunal de lo contencioso le dio la razón, pero no se me dio parte en ese proceso y razón entre otras por las que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias revocó esa sentencia declarando la inexistencia de los hechos denunciados. Es falso, por tanto, lo de sentencia firme; todo lo contrario, la sentencia firme es la que declaró la inexistencia del mobbing.

Efectivamente, es cierto que alguna empresa que no resultó adjudicatarias de las licencias de FM me denunció, pero el autor de este artículo interesadamente oculta o ignora (no sé que es peor) que esas interesadas denuncias ya han sido archivadas por la jueza de instrucción nº 5 de Santa Cruz de Tenerife porque, en su opinión, no hay indicios de delito, de ninguno.

De lo demás, ni caso…

Fernando Ríos Rull

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