FEPECO denuncia que las Administraciones Públicas han sido las únicas beneficiadas de la erupción del Volcán Cumbre Vieja en La Palma
Oscar Izquierdo, presidente de FEPECO, manifiesta que, en general, las Administraciones Públicas, en sus distintos niveles territoriales, no han estado a la altura de las necesidades o demandas ciudadanas y del sistema productivo palmero. Muchos viajes, reuniones, visitas, fotos, promesas o financiación, que se han quedado en nada e incluso no se han hecho realidad y si en algún caso, se han ejecutado, no han contado con la calidad y dignidad que se esperaba como respuesta.
Al final, el Gobierno Central, el Gobierno Canario y el Cabildo, se han limitado a gestionar con sus propios medios, por cierto, insuficientes e incapaces, una crisis, que les ha superado con creces, faltándole la prontitud requerida e incluso, convirtiéndose en competencia desleal al tejido empresarial privado, al abusar descarada e indiscriminadamente, de las continuas encomiendas y encargos a empresas públicas, como GESPLAN o TRAGSA, que son verdaderamente las únicas beneficiadas de los fondos que han llegado.
Es decir, ellos mismos se han guisado y comido el dinero que ha llegado, demostrando de esa manera, que tenemos una burocracia que no sirve, que no tiene capacidad gestora y que es incapaz de tramitar los fondos a través de los procedimientos normalizados, con las correspondientes licitaciones, para que puedan presentarse las empresas privadas. Lo público tiene el deber de ser exclusivamente subsidiario de la iniciativa privada y no suplantarla, porque de esa manera, sólo se llega a una sociedad subvencionada, acomodada y con falta de emprendimiento, que es lo que menos necesita La Palma y lo que está provocando, adrede, la Administración Pública.
Desde FEPECO, pedimos para la reconstrucción de la isla, prioridad para el tejido empresarial palmero y canario. Las empresas locales, cuentan con la suficiente solvencia, capacidad, potencialidad y profesionalidad, para acometer cualquier ejecución de obra que sea precisa. Están perfectamente preparadas, para poner todo su saber y obrar, en un territorio que conocen a la perfección y donde han demostrado históricamente, su buen hacer y capacitación. Teniendo una experiencia que hay que valorar suficientemente, junto a los medios propios con los que cuentan, que son importantes, modernos y de última generación, además, del personal especializado. La reconstrucción tiene que contar con materiales avanzados, enérgicamente eficientes, con una construcción moderna e industrializada, para construir viviendas dignas e infraestructuras suficientes, seguras y sostenibles.