La Fundación Juana Reyes defiende la necesidad de visibilizar la salud mental, romper silencios y pasar a la acción
La Fundación Juana Reyes, en voz de su presidenta, Isabel Aguilar, ha afirmado que la sociedad está a la espera de realidades políticas para reducir el estigma que sufren las personas que padecen una enfermedad mental y ha recordado que hay promesas realizadas por las administraciones desde hace tiempo que no llegan a concretarse.
Así lo ha indicado la presidenta de la entidad en un comunicado emitido con motivo del Día Internacional de la Salud Mental que se celebra este 10 de octubre, quien abundó que en esta materia "aún queda mucho por hacer".
Al respecto, observó que una de cada cuatro personas en el mundo sufrirá un trastorno mental a lo largo de su vida y que hasta 300 millones de individuos viven con una depresión, "cifra que va en aumento".
"No cabe duda de que la pandemia ha tenido un claro impacto en la salud mental de la población", expuso Aguilar, que destacó que fruto de esta situación la sociedad ha comenzado a tomar "conciencia" de estos problemas, lo que facilita la reducción del estigma.
La presidenta ha hecho especial hincapié en que "ahora es la ciudadanía quien es facilitadora de la reducción de ese estigma y espera hechos de contexto político. Es, por tanto, la hora de la salud mental".
Promesas que no acaban de materializarse.
No obstante, ha matizado que las administraciones han realizado muchas promesas desde hace tiempo que, sin embargo, "no llegan". "Se hace imprescindible la asistencia integral al paciente, el impulso de los equipos multidisciplinares y de la coordinación entre Salud Mental y Atención
Primaria", aseveró.
Aguilar no se quiso olvidar tampoco de los nuevos desafíos post-pandemia que existen esta materia como monitorizar a los grupos vulnerables que la pandemia ha identificado.
Por último, la presidenta de la Fundación Juana Reyes abogó por no dejar de ser persistentes y seguir trabajando. "Sabemos que hay dramas que se nos narran desde distintas plataformas, pero hay otros que necesitan voz", concluyó