Morales exige que Pedro Sánchez cree un mando único que coordine las divergentes políticas de sus ministerios en materia de migración
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha exigido hoy durante la visita del ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, que el presidente estatal, Pedro Sánchez, establezca un mando único que coordine las divergentes políticas de sus ministerios en materia de migraciones, pues involucra a Interior, Defensa, Exteriores y Migraciones, cuyo titular ha tenido que contestar a la mayoría de las solicitudes que “no es competencia” suya.
A la petición de coordinación se sumó el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, quien manifestó la conveniencia de que las islas sean visitadas por el presidente estatal.
Y es que el ministro de Migraciones tiene competencia a partir de las 72 horas desde la llegada de los migrantes, de los que presenció la recepción de 80 llegados a bordo de una embarcación de Salvamento Marítimo a Arguineguín, donde Policía Nacional, Guardia Civil y Cruz Roja realizan sus labores de filiación y cribado, entre otras, en unas condiciones que reconoció no son para nada las adecuadas, de hecho lo consideró una experiencia “impresionante” y “sobrecogedora”, pero “no es competencia” suya, sino del Ministerio de Interior, apostilló.
También es competencia de Interior la derivación, expuso Morales, otra de las peticiones del Cabildo para no convertir Gran Canaria en otra Lesbos que, sin embargo, hoy no pudo ser atendida porque no tampoco es competencia del ministro nombrado para atender este flujo, quien tampoco tiene la competencia de que el Ministerio de Defensa habilite instalaciones propias como las de La Isleta para la acogida digna de los migrantes a su llegada.
Escrivá consideró apropiada esta opción y la trasladará no obstante a Defensa, al igual que su experiencia de presenciar la llegada de migrantes en un día en el que se concentran en el muelle de Arguineguín casi 400.
Tal es la situación, que reconoció que no hay que descartar que esta crisis migratoria alcance los niveles de las pasadas crisis con miles de migrantes en Canarias, al igual que coincidió en lo inexplicable que resulta que 26 años después de recibir la primera patera Canaria aún no cuente con instalaciones para atender la situación. “En este país se nos da mal la planificación a largo plazo”, aunque esta última oleada ya suma meses y se sitúa en el corto plazo y tampoco ha sido resuelta.
Tampoco pudo ayudar Escrivá en la mejora del sistema de vigilancia, pues Gran Canaria tiene descubierta más de un treinta por ciento de su costa y se producen llegadas no detectadas con personas desorientadas deambulando que a su vez generan alarma social, pero este extremo también depende de Interior.
En cuanto a su competencia, aseguró que a partir de las 72 horas las personas llegadas están bien atendidas, para lo que han sido llevadas a hoteles, una solución “transitoria” y “costosa” que ya se ha alargado varias semanas sin visos de solución ni de un lugar no transitorio, ni de devolución, ni de derivación.