Juan Miguel Mena Torres, concejal de Sí se puede en La Laguna, se muestra preocupado por la conservación de unas de las edificaciones más destacadas del Casco Histórico municipal, en la que se encuentran enterrados centenares de antepasados de los actuales laguneros, la iglesia de San Agustín.

Este templo que data de las primeras décadas del siglo XVI y que vivió una drástica modificación en el siglo XVIII, sufrió un devastador incendio en el año 1964 que destruyó su cubierta y buena parte de sus valores patrimoniales. Unas obras sin control de técnicos de patrimonio o arqueólogos, llevadas a cabo en 1985, acabaron también con parte de la superficie con una pala mecánica, dejando al descubierto parte de las fosas sepulcrales que se encuentran en el templo, siendo visibles algunos restos humanos en la superficie hoy en día.

A pesar de que en el año 2005 se aprobó un concurso internacional de ideas para recuperar este espacio, la realidad es que nunca se ha llegado a poner en marcha y la excavación prevista para recuperar los restos humanos de los vecinos enterrados y los posibles vestigios de la antigua iglesia, prevista en el proyecto, ha quedado paralizada.  

Mena cree que es posible aprovechar este cincuenta aniversario del desastre patrimonial que sufrió la zona para al menos recuperar estos restos humanos que permitirían conocer mejor la vida en La Laguna del siglo XVIII, antes de que el abandono y la humedad sigan destruyendo estos vestigios, que actualmente se han convertido en jardines improvisados y gallineros por sus actuales ocupantes.

“Vamos a proponer a la Concejalía de Patrimonio que llegue a un acuerdo con la Universidad de La Laguna para realizar esta labor con los estudiantes de la Facultad de Historia”, explica. El edil de Sí se puede asegura que esta iniciativa es viable sin tener que recurrir al uso de gran cantidad de fondos públicos, que en este momento están tan limitados, “proponemos que, al igual que se está realizando en otros lugares, se promueva una campaña de crowdfunding con el que mediante el apoyo ciudadano podríamos recuperar esta parte de nuestro pasado”.

La iglesia de San Agustín, al igual que el resto de templos cristianos de esos años, fue utilizada como lugar de enterramiento hasta el siglo XIX. Los documentos históricos hablan de que, junto a centenares de ciudadanos anónimos, entre sus paredes se encuentran los restos de destacadas familias laguneras como la de los Nava y Grimón.          
Desde Sí se puede creen que la mejor manera de no olvidar el suceso de 1964 sería recuperando y estudiando esta importante parte de nuestro pasado, que apenas se ha tratado en La Laguna. “Al igual que pasó con las excavaciones de otros importantes templos de Canarias estamos convencidos que podremos conocer mejor la forma de vida de nuestros antepasados, además de ayudar a preservar nuestra historia, ante esta iniciativa creemos que podemos lograr la solidaridad de muchas personas, como se ha visto con los actos de apoyo a otras edificaciones de la ciudad”, finaliza el concejal ecosocialista.