Sí se puede denuncia que en este año 2013, el Sur de Tenerife no contará con la oficina de atención ciudadana de la Administración Tributaria Canaria ubicada en Arona, (Playa de Las Américas, Edif. Zentral Center, 3ª planta). Oficinas donde la ciudadanía de esta parte de la Isla podía realizar todos los trámites inherentes a sus funciones, que había conseguido el acercamiento de la administración pública a las personas.

La organización política asevera que el cierre de las oficinas comarcales de la Administración Tributaria Canarias, causa un gran daños a las personas residentes en la Isla, pues obliga a acudir a la central del servicios, ubicada en Santa Cruz, con el consiguiente perjuicio a los usuarios, que en la situación actual, con disminución de rentas y aumento del precio del combustible y el transporte, “condena a los residentes en la zona a un sobre coste, que incide gravemente en el presupuesto familiar”.

Desde Sí se puede Comarcal del Sur compuesto por los comités locales de Vilaflor, Guía de Isora, Granadilla y Arona afirman que en estas oficinas se tramitaba todos las gestiones de donaciones, herencias, transmisiones, altas censales, pagos de tributos competentes de la administración canaria, negociación de fraccionamientos de deudas tributarias y, un gran abanico de servicios, que a partir de enero de 2013, se tendrá que realizar en las oficinas centrales de Santa Cruz, cuyas consecuencias serán un agravante para la zona, ya que al tener que obligar al desplazamiento de la población, condiciona a los trabajadores autónomos y Pymes a realizas sus gestiones a varios kilómetros de distancias, al tiempo que ven incrementado los honorarios de gestión, pues los despachos profesionales tienen que incrementar sus facturas, al tener que cubrir los gastos de traslados a Santa Cruz.

La organización ecosocialista manifiesta su solidaridad con los más de 200 trabajadores públicos que pierden sus trabajos con estos recortes, al tiempo que le piden al Gobierno de Canarias que rectifique y que mantenga las oficinas comarcales abiertas y activas, pues de lo contrario se producirá un colapso en las oficinas centrales, que va en perjuicio de todos.