La Leyenda De Zula y Abrante En Agulo
El anfiteatro rocoso de Agulo está compuesto principalmente por dos montañas, una es hoy conocida con el nombre de Zula, y la otra como Abrante.
También es bien sabido que el Sol en el invierno no llega a la calle Cabaña (El Mantillo), hasta finales del mes de Febrero, mitológicamente podemos relacionar esto, con la leyenda de Zula y Abrante. Dice la leyenda lo siguiente:
"Parece ser que Zula, arrogante y apuesto mancebo amaba a la bella Abrante, trigueña y simpar doncella de Agulo. Tales amores repudiados por Gazaña madre de Abrante imposibilitaban que los jóvenes pudieran verse con la frecuencia de sus deseos. Primero una imposición tajante, luego la negativa rotunda.
Desesperada Abrante por la pertinaz testarudez de su madre, que mantenía una postura por la escasez de recursos del galán de su hija (apenas una punta de ganado, igual a diez ovejas o cabras) y como lo oteara paciendo su escaso rebaño por la cresta de la montaña desesperada huyó de su casa y salió al encuentro de su amado, sube por la ladera y costeados andenes y precipicios , tuvo la mala suerte de resbalar despeñándose ante los ojos enloquecidos de Zula que ve a su amada sucumbir con fin tan trágico.
Desesperado bajo a salto de "hastia" hasta donde yacía el destrozado cuerpo de su amada. Zula enloqueció de rabia, de dolor y vergüenza y utilizando hechizos suministrados por una bruja de Chipude logró que Gazaña tomara la pócima y que sufriera durante la vida a dolores sin cuentos en expiación de lo que había sufrido su amada Abrante en su caída por el precipicio.
Surtió efecto el brebaje y a Gazaña violes gritar desesperadamente, sus gritos se acentuaban más al caer la tarde aumentando en la noche. Zula no contento con esta venganza y siéndole imposible seguir viviendo sin la presencia de Abrante buscó de nuevo a la bruja para pedirle tratara de aumentar las sombras para mayor martirio de Gazaña. Contestole la Bruja imposibilidad de un nuevo mal sin otro sacrificio, a lo que comprometió Zula a realizarlo si lograba el efecto que pretendía.
Confirmó la Bruja la eficacia del ungüento pero tenía que realizar tan grande sacrificio, que tendría que proporcionarle la muerte; acepta resistivo Zula y la Bruja le dice que en el lugar donde se sacrificará, se levantaría una montaña tan grande que por la grandeza de su altura proporcionaría a Gazaña tanta sombra como suficiente para el constante sufrimiento que Zula deseara, y despeñándose al conjuro de la pócima clavó la perpendicular Montaña que deja en las sombras la región que habitaba Abrante, Gazaña sucumbió entre permanentes dolores en expiación a su pertinaz testarudez, que motivó la tragedia de Abrante y Zula."