Ángel Cruz Clemente y Darío Clemente Aguiar, formarán parte de los ilustres de Hermigua
Darío y Angelillo, tío y sobrino respectivamente, nacidos en el barrio del Estanquillo, compartieron desde jóvenes, el amor por el canto del romance y el toque del tambor.
Si el Baile del Tambor es, sin más, el baile de La Gomera, los romanceadores y tocadores del tambor, Angelillo y Darío, indiscutibles conservadores y divulgadores de la cultura folclórica y popular gomera, han paseado el nombre de Hermigua dentro y fuera de la Isla como integrantes y fundadores del grupo Coro y Danzas de Hermigua y Agulo
La Alcaldesa de Hermigua, Solveida Clemente, anuncia que el Ayuntamiento celebrará, el sábado 21 de junio, un pleno extraordinario para nombrar Hijos Predilectos del municipio a dos hermigüenses ilustres, los romanceadores y tocadores del Baile del Tambor D. Ángel Cruz Clemente, más conocido como Angelillo y D. Darío Clemente Aguiar, quien recibirá este honor a título póstumo.
La Alcaldesa subraya que Darío y Angelillo, “guardianes del baile de Tambor”, patrimonio vivo de la Isla, forman parte del patrimonio de todos los gomeros y, desde su nombramiento como hijos predilectos de Hermigua, pasarán a tener una consideración ciudadana muy especial porque entran en el libro de honores de la historia de nuestro municipio.
Darío y Angelillo, tío y sobrino respectivamente, nacidos en el barrio del Estanquillo, compartieron desde jóvenes, el amor por el canto del romance y el toque del tambor.
Darío trabajó casi toda su vida de pedrero y albañil, y al igual que muchos otros gomeros de su época, tuvo que emigrar a Venezuela para trabajar y ganarse la vida. Está considerado como uno de los mejores romanceadores del Baile del Tambor de La Gomera.
Darío Clemente falleció el 5 de marzo de 1991, pero su recuerdo ha quedado imborrable en la memoria colectiva de los ciudadanos de Hermigua como gran romanceador y difusor de nuestro acervo cultural. A él le debemos que el pueblo gomero, hoy en día, pueda seguir conservando y disfrutando de gran parte de sus tradiciones.
Ángel Cruz nació en 1929 y trabajó toda la vida como molinero, pero su gran pasión han sido siempre los romances. Angelillo cuenta que, en los molinos se reunían de noche muchos hombres a romancear y allí, siendo un niño, fue donde aprendió a cantar los romances.
Después, fue él, junto a su tío Darío Clemente, quienes enseñaron romances a las generaciones venideras, al formarse el grupo de Coros y Danzas de Hermigua y Agulo, dirigido por Doña Lilí Ascanio. Ambos, enseñaron el Baile del Tambor a Lilí Ascanio tal y como ellos sabían, es decir, para la procesión, pero luego Lilí lo adaptó para el escenario, le puso necesariamente algo de coreografía, y de este modo nació el conocido “Cambio de Mudanza”.
Con estos dos reconocimientos, serán cinco los hijos predilectos con los que cuente Hermigua, entre ellos la Folklórica LiLí Ascanio, el profesor completo, maestro de maestros D. Rodrigo Fagundo Fragoso y D. Virgilio Brito García, reconocido no sólo por su laborioso trabajo de recopilación y conservación de las tradiciones de la Isla, sino también por la relevancia y el brillo que para el municipio ha supuesto la difusión de su extensa colección etnográfica.