El Plan de Infraestructuras que impulsa el Cabildo de La Gomera actúa en estos momentos en la antigua carretera de Yorima en Valle Gran Rey para que pueda ser utilizada por peatones y ciclistas como alternativa al túnel. También se pretende generar una carretera por la que circulen los vehículos en caso de que se deba cortar al tráfico rodado el túnel, por el motivo que fuera.
 
Las obras cuentan con un presupuesto de 120.000 euros, un plazo de ejecución de seis meses y corren a cargo de la empresa pública Gesplan. Las actuaciones consisten en la construcción de una baranda de piedra y hormigón. En algunos puntos se está procediendo a un rectificado y enderezado de la actual barrera de metal ya que a lo largo de los años se ha visto afectada por desprendimientos. Otra de las novedades es la ejecución de una fuente en la parte baja del túnel y en la otra donde en la actualidad se encuentra el naciente. De esta manera se permitirá que se refresquen con seguridad los numerosos ciclistas y senderistas que discurren por este enclave.
 
Lo cierto es que desde principios de la década de los años ochenta se ejecutó por medio de diversas fases y según las disponibilidades económicas el túnel de la antigua carretera de Arure a Valle Gran Rey y más concretamente en Yorima. El objetivo era sustituir la tortuosa vía que discurría por varias partes del acantilado que permite el acceso desde Arure a la playa de Valle Gran Rey. Finalmente el túnel se concluyó y abrió al servicio público a principios de la década de los años noventa. A partir de aquí se fue ejecutando el emboquillamiento y revestimiento.
 
La longitud de la antigua carretera es de casi 1,3 kilómetros, aunque luego fue sustituida por un túnel de 625 metros lineales. La vía de Yorima constituye un auténtico mirador sobre Valle Gran Rey y desde la misma se pueden obtener unas magníficas vistas que abarcan desde los Ricos de Guadá hasta la Playa, uno de los enclaves más llamativos de la Isla y por lo tanto de los más visitados por los turistas.