La investigación de palmeras muertas en Valle Gran Rey continúa abierta

SEPRONA y agentes de Medio Ambiente del Cabildo continuan con las investigaciones.El informe de la Unidad de Medio Ambiente del Cabildo determina que la muerte de las palmeras no las causó el incendio.

La Unidad de Medio Ambiente del Cabildo Insular de La Gomera abrió el pasado mes de octubre una investigación por la muerte de decenas de palmeras canarias en el municipio de Valle Gran Rey con presencia de vestigios que indicaban la utilización de veneno de uso agrícola para causarles la muerte. En estos momentos existen estudios realizados por parte de biólogos del Cabildo que se encuentran a disposición de otras administraciones, así como de particulares, en la Unidad de Medio Ambiente del Cabildo.

 

Según el informe, presentado en su momento en la Consejería de Desarrollo del Territorio de la primera Institución Insular, se detalla que los responsables se sirvieron de taladros para perforar los troncos. Además, también se apuntaba como motivación la oportunidad propiciada por el incendio que afectó a la población de Valle Gran Rey para eliminar las palmeras, que en circunstancias normales hubiesen requerido, para tal fin, la previa obtención de autorización administrativa. Por parte de la Unidad de Medio Ambiente del Cabildo las investigaciones han determinado que las palmeras no fueron afectadas por el fuego, por lo que desde la primera Institución Insular se dio traslado a la Guardia Civil y ésta a la Unidad de Protección de la Naturaleza.

Es preocupante que se haya cometido un delito medioambiental con la excusa del incendio.

Ante tales hechos, cabe recordar que se desplazaron a Valle Gran Rey agentes de la Unidad de Medio Ambiente del Cabildo ante la información recibida por numerosas llamadas telefónicas referidas a la presunta muerte por envenenamiento de un gran número de palmeras canarias utilizando como método la perforación del estípite y posterior vertido de veneno. Una vez en el lugar, se llevó a cabo una inspección ocular en terrenos localizados en El Retamal, en Los Pedreros y La Casa de la Seda y se comprobó la existencia de varias decenas de palmeras canarias muertas que presentaban en los troncos uno o varios orificios simétricos por ejemplar, de 30 centímetros de profundidad, careciendo todas ellas de hojas verdes y con claros signos de haber sido afectadas por el incendio forestal acaecido el pasado mes de agosto.

En estos momentos continúa abierta la investigación por parte de la Unidad del SEPRONA en La Gomera y de agentes de Medio Ambiente del Cabildo. La consejera del Área de Desarrollo del Territorio, Ventura del Carmen Rodríguez, ha declarado que “es preocupante que se haya cometido un delito medioambiental con la excusa del incendio. Desde el Cabildo apelamos a la responsabilidad ciudadana para la conservación de nuestra naturaleza”.

Las palmeras en Valle Gran Rey se encuentran censadas y las afectadas están geolocalizadas y señaladas.