Más que un Belén, arte y tradición que une la familia
La familia Febles-Correa de Hermigua nos abren las puertas a una tradición que mantienen viva cada Navidad.
Belenismo o construcción de Belenes (también llamados nacimientos, misterios, pesebres, portales o pasitos en los diferentes países y regiones de habla hispana), es la representación plástica del nacimiento de Jesucristo, que se suele exponer durante las fiestas de Navidad en hogares, iglesias, comercios, etc.
Este año, como en los anteriores, la familia Febles Correa de Hermigua, belenistas de reconocida tradición, nos han abierto las puertas de su domicilio para ofrecer a nuestros lectores una galería fotográfica de el Belén, que cada año realizan en su hogar. Un trabajo que ustedes mismos, y juzgando por las fotos, podrán entender que bien podría calificarse de obra de arte.
El montaje, o más bien el esbozo del mismo, comienza desde finales de septiembre o comienzos de octubre con la reunión del “equipo familiar” en el que se desarrollan ideas y estudian aportes nuevos a la obra que cada año realizan.
Teniendo más o menos claro como será el Nacimiento del año, entre todos comienzan la elaboración del mismo, una tarea que durará más de un mes hasta dar por concluido el Belén.
La tradición nace en la familia desde hace ya bastantes años, de los que Angélica recuerda, comenzaron a realizarlo sobre una antigua cómoda y casi con lo básico.-La Virgen María, el Niño, San José y poco más.-nos dice.
Nos cuenta que, con el paso de los años , poco a poco han ido adquiriendo las diferentes figurillas que lo componen, lo cual ha significado que cada año se vaya haciendo más grande hasta el punto de ocupar casi una habitación de tamaño considerable.
También nos cuenta que parte del mencionado “Nacimiento”, como las casitas, panadería barandillas, caminos y otros adornos que se pueden ver, no son adquiridos en tiendas si no que están realizados por ellos, como buenos amantes de las manualidades y en las que, como demuestran las imágenes, impregnan un realismo exquisito. Prueba de ello es la elaboración de los paredones, algo muy tradicional y cotidiano en el paisaje de la Gomera, que han sido confeccionados con pequeñas piedrecitas siguiendo los patrones de ejecución de los mismos pero en pequeña escala. Destaca también este año la novedosa florístería con la que cuenta el nacimiento y que ha sido bautizada con el nombre de Pilar, la matriarca de la familia, como buena amante de la jardinería.
Preguntados por el significado y lo que les supone este arduo trabajo, destacan al unísono que, no importa las horas que dedican a la elaboración del belén, si no que esta tradición que mantienen lleva implícita la satisfacción de realizarlo entre todos y compartir esas horas en familia. Son recuerdos imperecederos el que elabores con tus padres los adornos que compondrán el Belén y sobre todo el sentarnos luego y regocijarnos “al amor de un chocolate” lo hecho.-Nos dice Angélica.
Terminamos la visita con el chocolate de rigor acompañado de una generosa torta de bilana, la promesa de repetir la visita las Navidades próximas y la invitación que nos hacen extensiva a nuestros lectores de los que dicen que "no sólo se conformen con las fotos y que lo visiten personalmente". Que serán bien recibidos y agasajados damos fe.
La redacción de este digital y su editor, considera que la exposición de un Belén de estas características debia estar en un lugar público del municipio a fin de ser más accesible y visitado no sólo por los residentes del municipio, también como reclamo a visitantes y como oferta de actividad navideña del pueblo.Quizá el año próximo.