Antonio Armas Fernández, presidente de Naviera Armas, se comprometió a realizar un estudio de viabilidad económica para la línea marítima interior de La Gomera, que en su día ya funcionó uniendo San Sebastián, Playa Santiago y Valle Gran Rey. Así se lo hizo saber a la consejera de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias esta mañana, durante una reunión de trabajo a la que también asistieron Elías Castro Feliciano, director general de Transportes, y Gustavo Santana, director gerente de Puertos Canarios.

La petición de la consejera responde al compromiso adquirido a principios de mes con Cristopher Marrero Galván y Sabina Rodríguez Cabello, concejales de Valle Gran Rey tras aprobar el pleno del ayuntamiento una moción por unanimidad encaminada a la recuperación de la citada línea.

En aquella reunión celebrada en el Parlamento de Canarias, Ornella Chacón señaló su intención de abordar este tema con las navieras que operan en las Islas y con otras instituciones relacionadas con el transporte. Para los ediles del PSOE de Valle Gran Rey, impulsores de la iniciativa, la línea es un servicio necesario para la cohesión social y territorial de La Gomera, y una necesidad estratégica para la Isla por ser un elemento de conectividad y también una oferta más para los turistas.

Chacón anunció también que su departamento ha logrado que en los presupuestos de 2016 se mejore sustancialmente la inversión en las carreteras gomeras, lo que además redundará en la generación de puestos de trabajo.

El presidente de Armas, la naviera con mayor arraigo en las Islas, apuntó posibles alternativas y rutas que incluirá en el estudio de viabilidad de esa línea interior. Armas posee actualmente 10 buques, 9 del tipo ro-pax destinados al traslado de pasajeros y mercancías de alta tecnología, y mantiene activas líneas entre todas las Islas y también entre el norte de África y Motril. Entre sus objetivos más inmediatos Armas espera finalizar en 2016 la nueva terminal de pasajeros en el Puerto de La Luz y de Las Palmas, en la que invertirá 45 millones de euros.

La naviera dispondrá de 30.000 metros cuadrados en estas nuevas instalaciones, que permitirán la maniobra de atraque simultáneo de cinco buques. Además espera recuperar la línea que en su día ya funcionó entre Puerto del Rosario y Tarfaya y que está a la espera de que finalicen las obras en el puerto marroquí.

Otro de los proyectos de futuro incluye el inicio de las operaciones de la naviera en el Puerto de Agaete una vez se lleven a efecto los trabajos de ampliación del muelle grancanario.