Sí se puede apoya la demanda vecinal sobre un horario de apertura para la iglesia de Chipude
Varios vecinos de Chipude se han puesto en contacto con Sí se puede para transmitir su profunda inquietud ante una situación que sufren desde hace muchos meses: la escasa flexibilidad en el horario de apertura de la iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria para poder ser visitada por feligreses y turistas.
Hace más de un año que por decisión del Consejo Parroquial, se procedió a la retirada de las llaves de la iglesia de los bares aledaños donde llevaban más de 40 años, lo que permitía que la iglesia pudiese ser visitada en cualquier momento y a cualquier hora prácticamente. Un hecho que fue dado a conocer por este medio, quien se hizo eco del malestar vecinal por la señalada decisión.
En ese momento se reclamó al párroco que estableciese, junto con las personas que componen el consejo parroquial, un horario de apertura y un teléfono de contacto, que fueran visibles al público en la entrada de la iglesia, todo esto para facilitar que pudiese ser visitada con la regularidad que hasta entonces había existido.
La Iglesia de Chipude es la segunda edificación religiosa que se realizó en nuestra isla, data del siglo XVI y fue construida por los aborígenes de la zona. Es el enclave de oración y peregrinación de muchos fieles devotos a la Virgen de Candelaria, además de ser un símbolo para los vecinos de Chipude y de toda La Gomera, para quienes vivimos aquí y para quienes se han marchado. Por todo esto y más es un lugar de alto índice de visitas y de un interés turístico relevante.
Está previsto que a finales de este mes de mayo comience una obra de rehabilitación de la cubierta de la iglesia para la que el Cabildo ha firmado un convenio con el Obispado de Tenerife por el que se compromete a colaborar con la cifra de 80.000 €. No es la primera vez que el Cabildo destina una cantidad de esta magnitud a su rehabilitación; en el año 2013 fueron 70.000€ los invertidos en la primera fase de este proyecto.
Desde Sí se puede se cree conveniente que, si el Cabildo y, por ende, toda la población gomera, destina dinero de sus arcas a esta edificación patrimonial, debe ser esta institución la que intente convenir también con el Obispado el compromiso de apertura de la iglesia en un horario amplio y acorde a las visitas que recibe, ya que, en la actualidad sólo se abre para los oficios religiosos y, fuera de estos, en muy escasas ocasiones.
Sí se puede cree que esta edificación religiosa así podría aumentar los atractivos turísticos que la zona alta de la isla ofrece a los visitantes, y podría ayudar en el desarrollo socioeconómico de los pueblos y caseríos de las medianías del sur de La Gomera.