Los trabajadores públicos recibieron formación sobre el alcance de la declaración de la Isla como Reserva de la Biosfera

La consejera de Desarrollo del Territorio transmitió la importancia de que los funcionarios incorporen a su labor diaria los principios de este título de la Unesco

Trabajadores del sector público de La Gomera recibieron hoy información de primera mano sobre el alcance y consecuencias que ha traído consigo la declaración de la Isla como Reserva Mundial de la Biosfera hace ya dos años. La consejera de Desarrollo del Territorio, Ventura del Carmen Rodríguez y Luis Cortázar representante de la empresa encargada de la campaña de divulgación que se está llevando a cabo por toda la Isla, fueron los encargados de resolver las dudas de los funcionarios.
 
La consejera dio la bienvenida a la veintena de asistentes y resaltó la importancia de que desde sus puestos de trabajo en la Administración pública sean capaces de incorporar en la labor diaria los principios que trae consigo la declaración. La consejera justificó el encuentro ante la necesidad de que las administraciones incluyan en su quehacer cotidiano “la filosofía y las pautas” derivadas del título concedido por la Unesco.
 
Las aplicaciones prácticas se plasmarían en aspectos como la ordenación del territorio, gestión del agua, conservación medioambiental o de las playas. La consejera anunció la próxima constitución del comité científico y el de participación, el primero formado por representantes de sectores académicos y el segundo de la sociedad. En este último caso se escogerán a los colectivos que participan en la campaña de divulgación que se está llevando a cabo por toda la Isla y que esta semana ha recalado en Valle Gran Rey, después de haberlo hecho en Agulo, Hermigua y Vallehermoso.
 
Cortázar explicó que uno de los principales objetivos de estos talleres es dar a conocer cómo encaja la declaración en la realidad de la Isla y recalcó que precisamente la Unesco está dando un gran importancia a la participación de los ciudadanos. El técnico señaló que ostentar esta declaración implica un reto porque “no sólo hablamos de una figura ambiental sino también de la imposición de una serie de condicionantes añadidos”. La Unesco cada diez años lleva a cabo una evaluación que podría implicar la retirada del título en caso de que no se cumpla con las normas impuestas.
 
Apuntó que se trata de una gestión tanto local como internacional dado que la Unesco valora el funcionamiento de una red integrada por todas las reservas mundiales. Ante la duda de qué es realmente esta figura, el técnico respondió: “hablamos de un laboratorio para llevar a cabo el desarrollo sostenible”. Las funciones son la conservación, desarrollo y apoyo logístico, que en este último caso implica apoyar la labor investigadora. En el primer capítulo se da tanta importancia al medio ambiente como a los aspectos culturales. Cortázar explicó también la zonificación establecida según el núcleo, zona tampón y de transición aunque acto seguido señaló que “una calle de San Sebastián es tan Reserva de la Biosfera como el Parque de Garajonay”.
 
También se explicó el marco normativo tanto internacional como estatal y regional. En cuanto a las obligaciones directas está la constitución de órganos de gestión, el científico y de participación, elaboración de un plan de acción y cumplimiento de las funciones. En cuanto a las vías de financiación se dejó claro que la Unesco no aporta fondos y que estos vienen de la UE o del ámbito nacional, aunque durante los últimos años los recortes han afectado a las inversiones. Otro objetivo añadido es dar a conocer el símbolo de la Reserva de La Gomera en todo lo que sea posible. Las dudas de los presentes se centraron en aspectos como la posible contradicción legislativa o composición y funcionamiento de los consejos.