Valle Gran Rey demanda más realidades y menos promesas
En su "muro de facebook" envían un extenso escrito a todos aquellos que "han venido estas semanas a pasear por nuestras calles con promesas de cambio y futuro".-
El Grupo en la Red social Facebook denominado Valle Gran Rey dirigen un extenso mensaje de reflexión para todos aquellos que como afirman "han venido estas semanas a pasear por nuestras calles con promesas de cambio y futuro". En su mensaje solicitan entre otras, respuestas para una Línea Marítima que no llega, y para la cual ya no basta con promesas de subvenciones, descuentos y negociaciones.
Por el interes de la nota reproducimos a continuación lo publicado en la mencionada página:
A todos aquellos que han venido estas semanas a pasear por nuestras calles con promesas de cambio y futuro. A todos quienes dedican unas horas cada cuatro años a visitarnos en busca del apoyo que financie su modo de vida una legislatura más.
A todos, en este momento próximo al cierre de campaña, querríamos invitarles a reflexionar porque: qué podemos esperar los ciudadanos de las instituciones europeas si quienes más cerca están, quienes mejor deberían comprender los problemas de este pueblo, han olvidados sus compromisos.
Qué vamos a esperar del Parlamento Europeo, si el Estado, el Gobierno de Canarias y las instituciones locales nos hurtan el cumplimiento de sus compromisos y nos han abandonado a nuestra suerte mientras vivimos de la inercia del turismo.
Valle Gran Rey merece más. Merece personas con vocación de servir a sus vecinos. Políticos de verdad, comprometidos con la gente y con su tierra permanentemente y no sólo quince días antes de las elecciones.
Porque aquí en Valle Gran Rey, igual que en el resto del país, hay gente que no tiene un empleo, que no tiene medios ni recursos y que necesita una oportunidad, mayores con pensiones miserables, enfermos en listas de espera interminables, personas dependientes sin apoyo y jóvenes que esperan una beca para continuar sus estudios lejos de su hogar.
Valle Gran Rey merece respuestas para una Línea Marítima que no llega, y para la cual ya no basta con promesas de subvenciones, descuentos y negociaciones. Existe una Obligación de Servicio Público cuyo incumplimiento prolongado durante más de dos años por parte del Gobierno de Canarias, nos unos derechos como ciudadanos europeos que ahora pretenden representar.
Valle Gran Rey merece soluciones para unas obras en el Barranco que han caído en el olvido del Estado y cuya situación actual es un recordatorio permanente del poco valor que los compromisos adquiridos y la palabra dada tienen para quienes estos días tanto prometen.
Valle Gran Rey no puede permitirse el lujo de tener una Avenida Marítima cortada, con un bateolas destrozado y un desvío al tráfico tercermundista.
Valle Gran Rey no puede permitirse millones de euros infrautilizados en un Muelle al que podrían estar llegando, no sólo cruceros sino también vehículos y mercancías en una línea que podría unir Tenerife, La Gomera y el Hierro, mejorando la conectividad y la competitividad de ambos destinos y liberando al Parque Nacional del tránsito de vehículos pesados.
Valle Gran Rey no puede seguir esperando por unas telecomunicaciones dignas que pongan coto al monopolio de facto al que nos ha condenado Movistar con una instalación ilegal.
Valle Gran Rey no puede ni debe afrontar el pago de la demolición de la Embotelladora de Taguluche, mientras el resto de instituciones eluden su responsabilidad y miran para otro lado, minando la escasa capacidad de inversión del municipio para los próximos años.
Valle Gran Rey necesita políticas de impulso a su sector primario, porque de cuanto se avance en este camino se conseguirá no sólo crear empleo digno y estable para muchas personas que necesitan una oportunidad, sino también contribuir al abaratamiento de la cesta de la compra, dar acceso a todos los vecinos a productos de alta calidad, crear conciencia ecológica y medioambiental, recuperar el paisaje los barrios y caseríos, generar sinergias transversales con la actividad turística y mejorar nuestra imagen de destino.
Y mientras esas necesidades estén presentes en nuestro día a día, las palabras y promesas sobran porque: aquí, en nuestro hogar, tenemos un recuerdo permanente del poco valor que tienen.
Valle Gran Rey necesita mucho más que promesas y propaganda y para nosotros sólo existe un camino claro e irrevocable, el camino del compromiso, del hecho, de la realidad. El camino del futuro que sólo se construye terminando lo que se empieza y al cual todos podemos contribuir porque como pueblo tenemos el poder de hacer que las cosas cambien. Bastaría sólo con estar unidos, juntos fuertes y determinados en la idea que JUNTOS PODEMOS.