¿Qué son los escraches?

El pasado viernes, unas 150 personas convocadas por la plataforma afectados por la Hipoteca (PAH) protagonizaron un intento de escrache frente a la vivienda particular del Presidente del Congreso de los Diputados, el Popular Jesús Posadas.

​Esta concentración fue convocada por la plataforma PAH dentro de la campaña de iniciativa para reclamar la dación en pago y el alquiler social. Pero, ¿Qué es un escrache? El escrache surge en Argentina durante los duros años de la dictadura militar que gobernó el país, desde finales de la década de los 70 a principios de los 80 del pasado siglo XX.

Consistía en una protesta pacífica frente a la casa de los ex altos cargos del régimen militar a los que el pueblo consideraba responsable de la desaparición de miles de compatriotas y a los que el Gobierno del entonces presidente Carlos Menem había indultado a partir de 1995. Estas protestas, pacíficas e incluso festivas, pasaron a convertirse en acoso e intimidación en los tiempos del célebre “corralito” en el año 2001, cuando las juventudes peronistas lo utilizaron contra el presidente de la Rúa y miembros de su Gobierno a los que consideraban responsable de la caótica y ruinosa situación del país.

El pistoletazo de salida en España comenzó con el “amago” de asalto a la vivienda del Vice-secretario General del PP, Esteban González Pons. Manifestantes de la PAH se pasaron más de 40 minutos aporreando la vivienda del Diputado donde sólo se encontraban sus hijos en esos momentos. En las ultimas fechas diferentes militantes del PP se han quejado de ser los únicos destinatarios de este acoso y algunos como la Diputada Asturiana Carmen Rodríguez perseguida e insultada por las calles de Oviedo durante mas de una hora, ya lo han denunciado en comisaría. La mayoría de los cargos públicos del PP que han sufrido algún tipo de coacción, asesorados por su partido estudian la presentación de demandas conjuntas.

Dirigentes del PP se preguntan donde estaban los miembros de la PAH cuando durante los años 2009, 2010 y 2011 ya se producían en España tantos desahucios como ahora y la entonces ministra de vivienda Carme Chacón, puso en funcionamiento 6 nuevos juzgados especiales para agilizar los procesos de desahucios. Varios dirigentes nacionales del PSOE e IU han condenado las coacciones a Diputados y Concejales y muchos han dicho no compartir los métodos de los seguidores de Ada Colau, líder de PAH y famosa por su reciente intervención en el Congreso de los Diputados en la que llamó criminales a los banqueros y prometió públicamente que “ningún diputado o diputada que no votase a favor de sus medidas, podría ir tranquilo por la calle”.

Están muy recientes las imágenes de Cayo Lara expulsado hace algunas semanas de una protesta pública contra los desahucios y tampoco fueron bien recibidos precisamente el eurodiputado y exministro López Aguilar y la dirigente de Juventudes Socialistas Beatriz Talegón. Para el historiador Fernando Paz estos fenómenos surgen siempre desde una supuesta superioridad moral. Quienes lo practican, se arrogan la representación del conjunto de la voluntad popular y lo hacen por encima de la legalidad vigente cuando consideran que esta es injusta.

Normas legales pero injustas…la justificación inmediatamente anterior a saltarse los mecanismos del estado de Derecho y a tomarse la justicia por su mano. El Director General de la Policía, Ignacio Cosidó, ha advertido que “ni la violencia ni la coacción tienen cabida en un sistema democrático” Para el escritor y periodista Isaac Rosa que ha asistido recientemente a un escrache para transmitir su apoyo a la PAH, “ve muy razonable lo que se reivindica y denuncia la absurda y exagerada criminalización que se hace de los escarches” y ha definido a estos como “un paseo pacífico donde se informa a la gente y se pegan pegatinas”.

En su opinión, se ha llegado a esta situación por la “incapacidad de reacción política ante un drama horrible como el de los desahucios” y ha cargado contra quienes critican estás protestas pero “a los que nunca se oye lamentar ningún desahucio”. El Fiscal General del Estado cree que “no se debe criminalizar cualquier acto de manifestación en el que haya críticas, incluso de libertad de expresión”, pero ha advertido también que “la fiscalía no se va a quedar pasiva ante cualquier desbordamiento de estos derechos”.

Termino con un párrafo y una reflexión del buen amigo Juan Antonio Alonso Velarde, “Nadie pone en tela de juicio que las entidades bancarias han sido y se han comportado como verdaderos usuarios de la Edad Media, con cláusulas abusivas y condiciones ocultas. Convengamos que el Gobierno, éste y los anteriores, ha actuado con demasiada permisividad y que la ley hay que cambiarla.

Sin embargo, lo que no se puede consentir es la violación de la intimidad porque a la señora Ada Colau le salga del bolo. Tal vez, habría que empezar a dar pistas sobre el domicilio de la señora Colau, a ver si le hace tanta gracia que se sepa dónde vive. Ya que es tan amiga de publicitar los domicilios de los políticos, pues empecemos por hacer público el de ella…es lo menos que podemos pedir para jugar todos con las mismas reglas, ¿cierto, no?.

José Ramón Medina Marichal es Consejero en el Cabildo Insular de la Gomera.-(Fuentes del autor: Notas de prensa. Artículos de opinión y Wikipedia.)