La Gomera Se Mueve.-No cabe ninguna duda, de que la palabra democracia es probablemente, una de las más prostituídas en estos tiempos. A muchos, se les llena la boca cuando la utilizan y creen que a medida que la van desgastando, ya están siendo democráticos. Lo que ocurre es que la democracia es una actitud, no una definición. Es democrático, quien ejerce el gobierno de forma democrática, con “talante” democrático, como habría dicho Zapatero.

Hemos rebajado el nivel que define a la democracia de tal manera, que pensamos que por el hecho de presentarnos a unas elecciones y ganarlas, cumplimos con la cuota de democracia establecida y no es así ¡En España ganó varias elecciones hasta Jesús Gil! Y no creo que nadie pueda decir a estas alturas, que su forma de gobernar fuera democrática. Es más, hasta Hitler en 1933, entró a gobernar la cancillería alemana, después de lograr la victoria en un proceso electoral. Con lo cual, creo que esgrimir la victoria electoral como único argumento, es bastante pobre y como se puede comprobar a lo largo de la historia, incluso falso.

Cabe decir además, que generalmente el triunfo en un proceso electoral es conseguido de manera más sencilla por el gobernante que ya está en el poder, porque maneja los resortes apropiados (es por eso que muchos políticos se eternizan en sus cargos) o por los políticos que pertenecen a los partidos llamados “grandes” que sacan a pasear su batería de fastos y opulencia en las campañas electorales, contra la que no pueden competir los partidos minoritarios.

Se puede manifestar sin ánimo a equivocarnos, que la ciudadanía ya no se conforma con votar cada cuatro años y cerrar la boca. Se quiere participar más activamente y recuperar el terreno perdido. Se quiere ser un “ciudadano activo socialmente”, no un mero espectador de los acontecimientos. Esta pretensión choca contra los que no quieren que nada cambie, contra los que tienen el mango del sartén del poder y piensan que cualquier cambio les perjudica. Contra los que defienden un modelo de sistema francamente en decadencia.

Con este compromiso con la democracia activa, el 10 de noviembre, La Gomera se Mueve, convocó una movilización en Santa Cruz de Tenerife puramente democrática. Y así lo fue, porque fueron invitados ciudadanos y colectivos de todas las ideologías. Fue una jornada reivindicativa, donde cada uno gritó las consignas que quiso y donde se abrió el micrófono para que cada uno expresara sus pensamientos y sus sentimientos. No hubo un guión y tampoco hubo ninguna censura a las opiniones vertidas ¡La democracia funciona así! Se puede decir con orgullo, que los gomeros tomaron Santa Cruz por unas horas.

Decir finalmente, que este clima de democracia y activismo crítico es el que vamos a mantener en La Gomera se Mueve, pues es el que creemos que se ajusta al siglo en el que vivimos y lo que una sociedad, cada vez más instruída e informada demanda. Creemos que este es el camino a seguir y animamos a los colectivos que también se adhieran a estos principios a que sigan adelante. A los que no vayan por esta senda y sigan pensando que vale con el ordeno y mando, que sigue valiendo con utilizar a los ciudadanos una vez cada cuatro años y después prescindir de ellos; deberían darse cuenta de que el mundo gira en otra dirección y que el paso del tiempo y de los acontecimientos, será implacable con ellos.