La opinión en democracia
Había adquirido la costumbre de expresar mis opiniones durante el fin de semana, pero creo necesario, hacer una salvedad, para puntualizar varias cuestiones ( por tanto, es probable que durante este fin de semana no escriba nada, para no saturar en exceso)
La opinión en democracia, es un derecho ( yo diría, que hasta un deber) que cualquier ciudadano puede ejercer, pero como todo en la vida tiene sus reglas, no es válido de cualquier forma.
Como días atrás, he sido señalado de manera directa en un artículo de opinión, creo que es apropiado que de una serie de explicaciones, que no estoy obligado a dar, pero en este caso, me apetece hacerlo.
¿Por qué escribo artículos criticando lo que sucede en La Gomera? Pues, en principio porque quiero. Soy un ciudadano libre, que paga sus impuestos y que vive de su profesión, por tanto, si en mi isla se dan situaciones que no me parecen aceptables ¿qué me impide criticarlas? ¿quién me lo impide? Nadie, por supuesto. Por tanto seguiré haciéndolo durante el tiempo que crea oportuno.
¿Por qué mis artículos van dirigidos, en gran parte, hacia el Cabildo y quiénes lo representan? Básicamente, porque el Cabildo lo ha acaparado todo en la isla y aparece hasta en las cosas más nimias. Está presente, en todos los órdenes de la vida de los gomeros, por tanto, no criticarlo es imposible. Además, se critica a quien gobierna y como yo no estoy nada feliz con quien gobierna, ya que no me gustan ni sus modos ni sus formas, pues lo expreso. Así de simple.
"Mis comentarios a las políticas de la isla, no están basados en suposiciones o en chismes"
Lo que me parece curioso, es que ante mis opiniones, jamás he recibido una crítica que consista en darme argumentos de que estoy equivocado. Por el contrario, sí que las he recibido (con argumentos pueriles) hacia mi persona. Me asombra que alguien pueda llegar a perder su tiempo atacándome, en una estrategia conocida como matar al mensajero, con la cantidad de cosas que hay que solucionar en la isla y en las que se puede emplear ese tiempo.
He de añadir también, que mis comentarios a las políticas de la isla, no están basados en suposiciones o en chismes, básicamente me dedico a opinar de las políticas que se llevan a cabo y que salen a la luz pública. El descontento en La Gomera, lo recuerdo desde que era casi un niño, otra cosa es que no haya sido expresado de manera directa y frontal como ahora. Pero los tiempos cambian, es ley de vida y que no tuviéramos costumbre de hacer algo, no significa que ese algo, no se pueda hacer ( yo no tengo mucha costumbre de ver billetes de 500 euros, pero eso no significa que no existan)
Para algunos, la única opción para ejercer la crítica es montar un partido político y presentarse a las elecciones (lo han repetido hasta la extenuación) pero eso es reducir la democracia a la mínima expresión. Están queriendo decir que si no te dedicas a la política, no puedes ni chistar y que cada cuatro años vayas como un chimpancé a las urnas, a hacer lo único que te toca, votar y cerrar la boca. Perdónenme, pero pensar así a estas alturas, es una auténtica brutidad. Es tratar de gobernar en el siglo XXI, como si fuera la Edad Media.
Otra cosa que me parece asombrosa, es la acusación (también infantil) de “están montando un partido político” como si tal cosa, fuera como estar montando un arma nuclear o como si viviéramos bajo una dictadura. La verdad es que no tengo conocimiento de ello, pero si ese fuera el caso ¿qué pasaría? ¿seríamos denunciados a la policía? ¿seríamos castigados sin cenar? ¿no querrían jugar con nosotros los demás niños en el patio del recreo? ¡Vamos, un poquito de seriedad!
Un pensamiento mediocre, también lleva a pensar que la política es la “panacea” y que todo el mundo quiere trincar un sillón (se suele dar, cuando se está en la política por interés personal, más que por vocación de servicio) Gracias a Dios, de momento, ejerzo una profesión que me gusta mucho y que no tengo intención de dejar, o sea que por ahí, no cojan nervios.
También se ha aludido que yo, y varios, hemos cogido el incendio como excusa para criticar. Yo no diría como excusa, pero como punto de inflexión, sí. Si un incendio que amenaza con arrasar tu isla, no es capaz de despertarte…`pocas cosas más lo harán. O no tiene sentimientos o estás muerto, solo caben estas dos opciones.
¿Yo puedo ser criticado? Bueno, no creo que mi persona tenga el menor interés para hacer tal cosa, además, yo no soy político ni gestor. Aparte de eso, si alguien tiene el tiempo libre para hacerlo, no le voy a quitar la ilusión. Pero la verdad, es que entrar en temas personales me parece de tener poca clase, porque, ni yo mismo lo he hecho y creo que tendría material para aburrir. Y repito, yo no soy político, por tanto, le tengo que rendir cuentas a mi familia únicamente, no a una isla entera. He aquí una gran diferencia.
¿Mis artículos pueden llegar a molestar? Parece que lo consiguen y esa es realmente su finalidad. En la medida en que más molestan, más me van confirmando que voy en la dirección adecuada, por tanto, más seguiré insistiendo.
Para terminar, señalo una crítica que me pareció bastante jocosa y que viene a decir que no voy por La Gomera. La verdad es que mi trabajo me gusta, pero mi sueldo es humilde (aunque suficiente, con la que está cayendo) y no me puedo permitir ir a mi isla todas las veces que quisiera, además, tengo bastantes obligaciones. Aunque viendo la expectación de algunos, prometo que la próxima vez que lo haga, anunciaré mi presencia, por si me quieren ir a saludar.
Pedro Rodríguez (La Gomera Se Mueve)