El aeropuerto gomero puede morir
El aeropuerto de La Gomera está infrautilizado y en ese contexto la privatización de AENA no es precisamente la noticia que esperábamos oír.
Parece bastante claro que los canarios tendremos que volver a recurrir al Tribunal Constitucional (TC) para que el Gobierno central reconozca lo que viene recogido en nuestro Estatuto de Autonomía. En la Constitución canaria se deja claro que los aeropuertos pueden ser gestionados directamente por el Gobierno del Archipiélgo en caso de que el Estado se desentienda de ellos. Hace algunas fechas el ejecutivo del señor Rajoy decidió cumplir alguna de sus peores amenazas y dio vía libre a la privatización en la práctica de la entidad que gestiona los aeródromos canarios. Desde entonces el 49% de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) está en manos privadas e incluso saldrá a bolsa como si de un negocio más se tratara. Cuestión de dividendos, de beneficios y pérdidas.
El Gobierno central no siempre parece comprender que en el caso de Canarias cuando se habla de aviones o barcos no nos referimos a un lujo o a un capricho. Movernos por aire o por mar en el Archipiélago supone toda una necesidad. Cualquier persona de la Península puede coger su vehículo y conducir por medio mundo sin mayores problemas que recagar el depósito de su vehículo, cambiar de tren o de guagua. Sin embargo, los canarios tenemos limitada nuestra movilidad por el muro infranqueable que supone el mar.
Las ayudas públicas que se otorguen siempre serán pocas. Hace algunas fechas durante el debate del Estado de la nacionalidad pedí que el ejecutivo autónomo aplicara un descuento del 75% para las conexiones entre La Gomera y Tenerife. Esta misma medida se va a aplicar en la futura línea sur de nuestra Isla, entre El Hierro y Tenerife y entre La Graciosa y Lanzarote. Por lo tanto no vemos la razón por la que no se pueda aplicar también en La Gomera. Así se lo expuse personalmente al señor presidente del Gobierno canario, don Paulino Rivero durante su reciente visita a la Isla.
La Gomera es especialmente sensible a cada una de las decisiones que se tomen en materia de transportes, tanto aéreo como marítimo. Por eso siempre estamos vigilantes de los pasos que se den y los acuerdos que se adopten. Y por ello nada más conocer la noticia de la privatización de AENA lamenté que nuestros gobernantes no se hubiesen preocupado más por conseguir que el aeropuerto de nuestra Isla sea rentable. O al menos sostenible, a sabiendas de que es el soporte para un servicio público esencial. Ya he dicho en varias ocasiones que nos encontramos ante una infraestructura estratégica que en su día fue una aspiración largamente acariciada por los gomeros pero que con el tiempo nos ha llevado a la decepción. Y es que nos encontramos con un aeropuerto con tarifas muy altas, poco sostenible para las economías modestas y con malos e inadecuados horarios para los gomeros y visitantes. La conectividad sólo puede ser calificada de insuficiente al obligar a los viajeros a hacer escala en Tenerife Norte para ir a Gran Canaria, lo que resulta insostenible.
El aeropuerto de La Gomera está infrautilizado y en ese contexto la privatización de AENA no es precisamente la noticia que esperábamos oír. Esta decisión pone a nuestro aeropuerto al borde de su cierre. Con datos financieros, fríos y contables en la mano, instalaciones aéreas como la de nuestra Isla no tienen muchas oportunidades de sobrevivir. Si ese fuese el escenario, --y haremos todo lo posible para que no ocurra así--, entonces los gomeros daremos un paso atrás. Retrocederemos décadas hacia un tiempo en el que nos sentíamos un pueblo aislado. Porque con la privatización todas las preocupaciones se centrarán en los aeropuertos más rentables y menos o nada en los deficitarios. Mucho me temo que dejarán al aeródromo gomero de la mano de Dios y a punto de morir.
Llegados a este punto queda claro que estas infraestructuras son claves para la movilidad y estratégicas para consolidar el turismo como sector básico en nuestra economía y en la creación de empleo. Para ello basta mencionar un dato: esta actividad económica aporta el 38% del Producto Interior Bruto (PIB) canario y de hecho el 88% de los 14 millones de turistas que llegaron el pasado año al Archipiélago, lo hicieron a través de medios aéreos.