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viernes, 15 de noviembre de 2024 12:37h.

No son flores de un día

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"El camino no ha sido fácil pero con voluntad y generosidad hemos sabido llegar a un acuerdo basado en un programa social y de cambio que nace bajo la premisa de ser de utilidad..."

Todo cambio produce un estado de incertidumbre en el ser humano, puesto que implica una modificación en las circunstancias de nuestro entorno. Salir de la zona de confort conlleva sus riesgos pero en la mayoría de las ocasiones supone un impulso al desarrollo y enriquecimiento personal. Ya lo dijo el filósofo griego Heráclito: “Nadie se baña dos veces en el mismo río”. Cuando alguien regresa a un mismo cauce, las aguas no son las mismas ni tampoco ese alguien es quien antes fue.

Canarias atraviesa una situación de cambio político, económico y social que debemos afrontar sin titubear. Llevamos demasiados meses inmersos en precampaña, campaña y negociación de pactos de Gobierno. La ciudadanía está agotada de los entresijos políticos y de oír hablar a los políticos de los propios políticos. Es momento de tender la mano al oponente, levantarnos y sacudirnos la arena de la brega.

Es hora de dejar atrás los repetidos esfuerzos por reconstruir los días y los movimientos previos a la firma del acuerdo de Gobierno. Lo que pudo ser y no fue. Lo que tal vez algunos quisieron que fuera. Lo dicho y lo que nunca se dijo. Quién llamó a quién y para qué. Mi teléfono ha llegado a un hartazgo de llamadas que sólo hablan de aritmética y cuotas de poder y clama por el regreso a la actividad habitual en la que gran parte de mis llamadas son para atender y resolver los problemas reales, los que afectan a la ciudadanía. 

La desigualdad, los salarios precarios, los sobrecostes que sufren las Islas no capitalinas, la escasez de vivienda pública, la diversificación económica, el refuerzo de los servicios públicos, la sanidad y la educación son algunos de nuestros objetivos que figuran en nuestra agenda de Gobierno como prioritarios. Queremos trabajar cuanto antes para solventar estas cuestiones y para ello es primordial tener un Gobierno eficaz. 

Cierto es que contamos desde hace meses con un nuevo Estatuto de Autonomía, que viene a sustituir al de 1982, y una nueva Ley de REF, en la que se recogen los derechos históricos que tiene el Archipiélago en materia fiscal. Normas fundamentales para que la vida de nuestros hijos y nietos sea mejor pero tenemos que defender su desarrollo y aplicación, no como mera limosna sino como derechos irrenunciables. Esta será otra de nuestras tareas fundamentales que sin duda tendremos siempre en cuenta de forma transversal a todas nuestras acciones de Gobierno.  

El próximo día 11 y 12 de julio, el candidato a la Presidencia de Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, será investido como líder del Ejecutivo regional. Con este pleno daremos el pistoletazo de salida a cuatro años de un proyecto que se asienta sobre ocho ejes que constituyen la base de la  gobernabilidad de Canarias, empezando por la lucha contra la pobreza y la exclusión social; el fortalecimiento del estado del bienestar, potenciando y mejorando los servicios públicos esenciales; fomento de la igualdad de género; y favorecer la creación de empleo y el crecimiento económico.

El camino no ha sido fácil pero con voluntad y generosidad hemos sabido llegar a un acuerdo basado en un programa social y de cambio que nace bajo la premisa de ser de utilidad, con proyección de continuidad y lleno de vitalidad para hacer una Canarias mejor. 

Este acuerdo suscrito entre PSOE, NC, SÍ Podemos y ASG ha sido denominado ‘Pacto de las flores’, pero al contrario de lo que opinan algunos, tenemos el compromiso ineludible de abonar y regar a diario para que no marchiten con la llegada del otoño. No es un pacto caduco sino perenne, por lo que mantendrá sus hojas frescas y dará frutos incluso más allá de estos cuatro años.

Estamos ante una tarea en Canarias muy complicada pero apasionante porque tenemos la responsabilidad de mejorar la vida de los canarios y canarias. Hay mucho por hacer y estamos obligados a hacerlo, así que pongámonos a trabajar desde ya. El reloj ya está en hora y tiene cuerda para rato.