La Gomera 2015: La encrucijada
"Pasados los tiempos de la obras tan faraonicas como esteriles, ni el asfalto, ni el cemento, ni siquiera los pocos aviones que aterrizan en el Aeropuerto de Alajeró dan de comer"
Estrenamos columna de opinión a la par que año.
Desocupado lector:
Este año que hace menos de veinticuatro horas empezó, se nos antoja crucial. Crucial para La Gomera y crucial para la nación mas vieja de Europa: España. Y es crucial porque es año de elecciones municipales y autonómicas y anteaño, (o según algunos analistas, posiblemente), de elecciones generales.
La Gomera está, al menos desde milnovecientos ochenta y siete, bajo un régimen tan parecido al de Andalucía, que la sola contemplación y comparación es tan patética, como para que no asuste. Asusta contemplar la realidad gomera: un marasmo de paro, pobreza y corrupción.
El gran timonel del Régimen ha sido naturalmente Casimiro Curbelo Curbelo, el aún Presidente del Cabildo. Casimiro Curbelo se ha convertido en el nuevo Conde de La Gomera. Al igual que el Conde de Romanones y de la mano del PSOE, ha practicado el caciquismo mas clientelar y reticulado que imaginarse pueda. No ha quedado a derecha e izquierda, arriba y abajo, quien no haya sido tocado por la seda de la telaraña que ha estado tejiendo desde los tiempos en que fué alcalde de San Sebastian de La Gomera. Del mismo modo que el Conde de Romanones compraba votos pagandolos en pesetas, el ex-senador putero ha comprado votos, voluntades y favores en pesetas y en euros.
Pero no nos engañemos, no.Para que alguien pueda comprar algo, se necesita que alguien este dispuesto a venderlo, y el gomero al uso de estos últimos años olvidó su pasado de sacrificios, trabajos, emprendeduría y honradez, para venderse a la nueva moral del dinero fácil, del trabajito para el cabildo o el ayuntamiento, del pelotazo urbanistico, del arrimarse al arbol que buen cobijo da. Y así nos ha ido. Lejos quedaron,en aquella tesitura,los tiempos en que el gomero cultivaba la tierra, trabajaba, estudiaba, salía fuera, emprendía negocios, creaba riqueza fuera y dentro de su tierra y triunfaba. Lo más fácil era en una suerte de espiral interminable trabajar para el cabildo, el ayuntamiento, o para los mas leales o mas enchufados siervos para ambos y engrosar las filas del paro después. Todo ello,en una espiral como dije que se retroalimentaba asimisma "ad eternam",pero a la que le llegó su fin. Y llegó a su fin con una crisis que ha golpeado duramente a España, a las islas y a La Gomera. Pasados los tiempos de las obras tan faraonicas como esteriles, ni el cemento, ni el asfalto, ni los pocos aviones que aterrizan en Alajeró dan de comer a una inmensa mayoría, y los terrenos baldíos siguen esperando la mano amorosa del agricultor que sabe de sacrificios, de esfuerzos, de trabajos, muchas veces poco gratificantes, pero que tambien sabe que cuando se siembra con amor, se recogen frutos, que cuando se cultiva una cultura de esfuerzo, de trabajo, de estudio también se progresa, se mejora , se triunfa.
Por eso, nuestro rubicón pasa por cambiar de malas costumbres, por cambiar de mentalidad, por acordarnos de que nuestros ancestros lucharon con denuedo por un futuro mejor para ellos y para sus hijos. Un futuro en libertad, armonía y justicia, algo que estan muy lejos de garantizar las mismas caras, de los mismos caciques que han venido tejiendo la red de telaraña, los "tentacoli dello piovra gigantesco de La Gomera".
Seudónimo de Autor: Fm2 gomera. El libérrimo hijo del canónigo.