Olvido Hormigos: los cuernos y frotamientos más rentables
Quiero creer que el exmarido de Olvido Hormigos, Jesús Atahonero, conserva intactas sus facultades mentales.
Desde luego, no debe ser nada fácil haber convivido con una señora más ligeras de cascos que una señorita de saldo y esquina de la calle Montera, con la diferencia de que una cobra por los servicios y está ahí por necesidad y la de Los Yébenes, en cambio, se trajinaba todo lo que pasara por delante y lo que le echaran de más.
Me sorprendió ver a Atahonero en ‘Sálvame Deluxe’ porque hasta la fecha él no estaba muy por la labor de darle más coba al asunto y no va para nada en un carácter más bien apocado. Sin embargo, harto ya de esta situación de cuernos, de imágenes en la que su señora se iba de picos pardos sin pudor alguno y dejando cada vez más dañada la imagen de su propia familia (a pesar de que hace apenas unos meses fue madre por tercera vez), supongo que el tentador cheque de la tele para resarcirse de las zorrerías de esta tipeja era demasiado jugoso como para dejarlo escapar.
Hay quien puede ver en esta aparición una especie de estrategia que le puede venir muy bien a Olvido porque, en cierta medida, vino a justificar la actitud de Olvido como la de una enferma y adicta al sexo. Vamos, que se follaba lo primero que le pasara por la entrepierna, pero al mismo tiempo venía a reconocer que la señora en cuestión tampoco quiso ponerle un parche o un remedio a su enfermedad con los pinchitos y al final tuvo que mandarla bien lejos. Veremos a ver cuál será la nueva hazaña de la descocada de Los Yébenes. Pobre, eso sí, del que crea que la puede tener como pareja formal. Los cuernos le iban a llegar a la luna (y no a la de Valencia, precisamente).