El Centro de Talasoterapia de Hermigua; una patata caliente para la Administración Local
El Alcalde de la localidad ha anunciado su apertura parcial para este verano. La apertura total supone un gasto que podría ser inviable para la Administración Local.
Más que unas piscinas. Así podrá definirse el Centro de Talasoterapia de Santa Catalina en Hermigua cuya finalización ha culminado en estos días y ha sido entregada, aunque no aún de forma oficial, al ayuntamiento de la localidad, donde cuentan al menos con las llaves del fastuoso Centro.
La institución insular que, ha invertido más de cuatro millones de euros en la ejecución de este proyecto puntero en la Gomera, se realizó con la intención de abrir Hermigua al mar. O, lo que es lo mismo, dar satisfacción a las necesidades del sector turístico y explotar las posibilidades del océano para los vecinos.
Sobra decir que el edificio en si, es un centro deportivo y de ocio que podría marcar un antes y un después en la vida del norte de la Isla. Un edificio que se podría convertir en polo de atracción de visitantes, revulsivo económico y centro de disfrute ciudadano.
A diferencia de las anteriores piscinas, estas presentan un espacio cubierto que las hace idóneas para su disfrute durante todo el año, principalmente en invierno dada la su tipología constructiva.
El edificio cuenta además con un bar, gimnasio, salas para la realización de actividades, una grada sobre las piscinas, sala de controles y maquinaria, spa-jacuzzi y baños correspondientes, así como oficinas. En todos los rincones impera el diseño contemporáneo.
Si bien y a la vista del resultado, nada parece que a las nuevas instalaciones se les pueda objetar nada negativo, lo cierto es que, a partir de ahora se abre un nuevo tiempo en el que el Ayuntamiento de Hermigua tendrá sobre “su cabeza”, una instalación más que tratar de aperturar y mantener y que, por si sola, disparará el gasto hasta el punto, creemos insostenible para el municipio.
Otras serán las fórmulas que deban buscar desde el Ayuntamiento para que la puesta en funcionamiento de esta tan esperada infraestructura, desde buscar el apoyo de otros municipios o la Licitación para la Explotación por parte de empresas privadas u otras, no suponga una sangría para las arcas municipales que a buen seguro no soportarían.
De momento ya ha anunciado el alcalde de la localidad, Pedro Negrín, que este año se prevé su apertura pero de forma parcial, esto es, las piscinas y las duchas. El resto de la infraestructura permanecerá no operativa por falta de “dineros”.
Lo dicho, un edificio que podría ser un revulsivo para el turismo y el empleo en Hermigua, pero que de momento, es una gran “patata caliente” para los actuales Gobernantes.