Como actuaría la justicia alemana si Baviera se declarase independiente de Alemania (Por José Antonio Cabrera Martínez)
Pues bien, Baviera, como hemos visto tiene más derechos históricos y más importancia actual que Cataluña. Pero ni se les ocurre pensar en la independencia, como hace Cataluña y con su rebelde líder fugado a Alemania y la Justicia alemana consintiéndolo. Esa justicia alemana que no tolera ni siquiera un pensamiento de independencia, de ninguna de sus Regiones
A propósito de la actuación este fin de semana en el Festival de Música de Canarias, de la que con el título honorífico de Orquesta Filarmónica del Estado de Baviera recorre regularmente el mundo como embajadora cultural de esa región y también de toda Alemania.
Y cuando todavía continúa la polémica en toda la Unión Europea, por el escandaloso dictamen de un Tribunal de Justicia alemán, condicionando la entrega a España de un rebelde independentista catalán, se nos ocurre pensar qué hubiese pasado si la declaración de independencia la hubiese hecho una región de Alemania, por ejemplo Baviera. Y poner de ejemplo a Baviera no es hablar de una región cualquiera y lo explico.
Para empezar, oficialmente es: Estado Libre de Baviera y es el mayor de los dieciséis Estados Federados que conforman la República Federal de Alemania. Se encuentra en el sureste y su capital es Múnich, cuenta con una población de cerca de 15 millones de habitantes y posee una interesante Historia, que recordaremos.
Las tierras bávaras fueron habitadas por celtas, romanos, germanos y francos que la convirtieron en un Ducado que resistió las incursiones de los eslavos y permitió la cristianización, cuando San Bonifacio llegó y organizó la Iglesia bávara, ya en tiempos de Carlomagno, sufriendo luego invasiones de los húngaros. Posteriormente se unió al ducado de Sajonia, aumentando su poder ya en tiempos de Federico Barbarroja hasta que llegaron las particiones hereditarias con la Alta Baviera, el Palatinado y la Baja Baviera.
En la época de la Reforma Protestante, Guillermo IV se alió con los Habsburgo y ayudó al emperador Carlos V, frenando las doctrinas protestantes en su ducado, obtuvo del Papa derechos sobre obispados y monasterios, e invitó a los jesuitas al Ducado y favoreció los decretos del Concilio de Trento. El Duque Maximiliano I jugó un papel importante en la Guerra de los 30 años y en la Paz de Westfalia, adquiriendo el Alto Palatinado. Maximiliano II intervino al lado de Francia en la Guerra de Sucesión Española.
Tras Maximiliano III, se unieron Baviera, el Palatinado y los ducados de Jülich e Iceberg. Austria no toleró un estado tan poderoso junta sus fronteras y junto con Francia invadieron y tomaron el Palatinado y los ducados de Zweibrücken y Jülich. Posteriormente, cuando Napoleón abolió el Sacro Imperio Romano Germánico, Baviera se convirtió en un Reino en 1806 en la Confederación del Rin, y su alianza con Napoleón le permitió anexionarse el Palatinado y Franconia.
Se aprobó la primera Constitución, modernizada en 1818, que hizo de Baviera un Estado Liberal, ya con Luis I.
Participó en la Guerra contra Prusia del lado austriaco y en la guerra franco-prusiana contra Francia.
Al proclamarse el Imperio Alemán en 1871 se adhirió al mismo conservando su categoría de Reino y autonomía administrativa. Con el fin de la Primera Guerra Mundial Baviera adoptó un régimen republicano integrándose en la República de Weimar, conservó el Palatinado y adquirió Coburgo en 1920.
Baviera fue el lugar de nacimiento del nazismo y donde Hitler protagonizó un golpe fallido (putsch de Múnich 1923). En esta región se celebraron los grandes congresos y desfiles del partido nazi. Como centro industrial fue intensamente bombardeada durante la 2ª guerra mundial y quedó dentro de la Zona de ocupación norteamericana.
Dotada de una nueva constitución en 1946, el Estado Libre de Baviera, se adhirió a la RFA en 1949 como un Land más. En la actualidad, Baviera es una de las regiones europeas con una economía más fuerte. Su producto nacional bruto supera por sí solo a 21 de los 27 estados miembros de la Unión Europea. El rendimiento económico per cápita se sitúa claramente por encima de la media alemana y europea, con una de las tasas de paro más bajas de Alemania. Es uno de los lugares más activos del mundo de investigación científica.
En Baviera se encuentra la sede central de numerosas sociedades y empresas de renombre mundial, las automotrices como Audi (Ingolstadt) y BMW (Múnich), las industriales Siemens AG y MAN AG, firmas deportivas como Adidas y Puma (Herzogenaurach) y la aseguradora Allianz, además de varias empresas multinacionales que tienen una de sus sedes en este estado.
La tasa de desempleo se situó en 3,9 % frente al 7,3 % en Alemania. Baviera es el primer destino turístico en Alemania. En Hallertau, una región entre Múnich e Ingolstadt, se cultiva el lúpulo, considerado «el oro verde» de Baviera. De las cerca de 19.000 hectáreas cultivadas en Alemania, 14.220 se encuentran en esta región.
Pues bien, Baviera, como hemos visto tiene más derechos históricos y más importancia actual que Cataluña. Pero ni se les ocurre pensar en la independencia, como hace Cataluña y con su rebelde líder fugado a Alemania y la Justicia alemana consintiéndolo.
Esa justicia alemana que no tolera ni siquiera un pensamiento de independencia, de ninguna de sus Regiones, ni siquiera del Antiguo Reino, hoy Estado Libre de Baviera.
(*) Periodista. Escritor. Editor