No somos ruido social, somos espectadores de Gran Hermano
Por Ruth Moreno.- "Desde que en Septiembre arrancara la decimoquinta edición de Gran Hermano, nunca antes habíamos llegado a las puertas de unas expulsiones tan tensas entre concursantes nominados".
Mientras ellos son ajenos al revuelo formado por la próxima expulsión, en el exterior, nosotros los fieles espectadores, y los que amamos este formato, vemos un sinfín de incongruencias que se aglutinan desde no hace muchas ediciones.
Los que si vemos el 24 horas, las galas y los debates notamos lo que la dirección resume como imposible resumir tanto contenido, el caso es que al igual que para ellos esta queja va siendo habitual, para nosotros la misma respuesta se ha convertido en una monumental irritación.
En la web del programa, hemos visto una pestaña dedicada a Paula, hemos visto como en una noche como Halloween a ella le han puesto un oso panda, muy típico de estas noches ¿verdad? La hemos escuchado decir que pegaba a su abuela de 90 años y a su madre y el programa lo ha omitido. Le dieron una maleta con ropa equivocada que era de Shaima ya expulsada desde hacía días, pero le entregan “fortuitamente” su ropa en uno de los momentos más álgidos del transcurso de la semana, el día del debate. Han revuelto a la casa y al público porque se expuso y fue expulsado posteriormente Vitín y no Omar.
Han utilizado unas imágenes más favorecedoras hacia Paula para anunciar a bombo y platillo el programa. Le registra el armario y sus intimidades a Lidia Torrent Anca, previo permiso positivo de Floren Abad, y hasta les resulta tan cómico que lo retransmiten en un vídeo con una música cirquense.
No me parece justo el trato en el exterior que se le ha dado a Omar y a su pareja Lucía. Desde que salió expulsada esta pobre muchacha no recibe sino abucheos por todos lados, y a Omar, se le ha tildado hasta de maltratador. Como puede una periodista apelar a todas las mujeres en detrimento hacia él, para que voten y lo expulsen? ¿Cómo puede un colaborador que trabaja para el programa sortear su ropa para que voten y expulsen a Omar? ¿Qué más nos queda por ver Jaime Guerra?
¿Qué mal puede haber causado este muchacho que no se asemeje con la realidad?
Entra en el programa a cuatro días de haberlo dejado por una ridiculez, con su novia de cuatro años, se enrolla con Paula durante doce días y cuando entra de nuevo su ex novia, vuelven. Se da cuenta que es la mujer que verdaderamente ama. En esta historia los tres han sufrido, pero es el motivo para condenarle a él por el resto de su concurso? ¿Soy la única que ve el progreso del chaval?
Anoche lloraba a moco tendido en el confesionario y daba infinitamente las gracias al programa por mejorar su vida, no quiere el dinero para hacerse un interviú, quiere arreglar su casa y volver a estudiar ¿cuál es el mal? No se puede alargar más una relación de 12 días para beneficiarse de un gran concurso como es este.
Tenemos a unas primas que con su temprana edad superan cada semana las nominaciones y el hostigamiento de concursantes como Fran. Tenemos a una Azahara que en su interior habita una olla express de emociones con Juanma.
En fin, la suerte no está echada aún, pero desde aquí, espero y confío que la audiencia expulse a Paula y el resto de los concursantes respire, veamos la cara de todos al regresar a Omar, la unión primista, la desolación de Luis… Esto es Gran Hermano, no nos lo manipulen más por favor.