El Partido Socialista no es el Monopoly

Y ustedes se preguntarán: “¿qué le ocurre a esta compañera socialista para empezar este artículo con la definición de un juego de mesa que es además, del siglo pasado?”

María González.-Todos conocemos el “Monopoly” como un juego de mesa para jugar en familia, donde los participantes tienen como objetivo conseguir la bancarrota de los demás y aumentar la fortuna personal, consiguiendo el monopolio. La particularidad del juego es que a pesar de contar con unas reglas determinadas son imprescindibles la estrategia y la suerte.

Y ustedes se preguntarán: “¿qué le ocurre a esta compañera socialista para empezar este artículo con la definición de un juego de mesa que es además, del siglo pasado?” Pues la respuesta es bien sencilla, ya que por todos es sabido los problemas internos por los que atraviesa nuestra formación política, “gracias” al comunicado emitido por algunos miembros de la Comisión Ejecutiva a los medios de comunicación, donde plantean su dimisión.

Comparar al PSG con un simple juego de mesa es, tristemente, la imagen que tres o cuatro han creado de nuestro partido con sus últimas actuaciones, y me explicaré: dejando de lado el carácter económico del “Monopoly”, el resto de características del mismo ,estrategia, consecución de determinados objetivos, algo de suerte, etc son muy similares a las actitudes adoptadas por algunos de los miembros de nuestra Ejecutiva, que mediante esa estrategia concienciada y concienzuda intentan llevar a todos los socialistas gomeros a la ruina o a la bancarrota como dice la definición, intentando arrasar con la Secretaría General y con ella a su Secretario, ¡que por cierto…!¡Les recuerdo! Fue elegido por todos mediante proceso electoral, incluido ustedes, el 10 de noviembre de 2012, fecha de nuestro último Congreso Insular.

Y además está dando la impresión de que sólo se persiguen intereses y objetivos personales y particulares, para conseguir ¿no sé qué?, ¿ni cuál? “monopolio” siempre con la presunción de inocencia por delante.

Pero dejando ya las comparaciones y esta aburrida y absurda partida, ya es hora de que vayamos llamando a las cosas por su nombre, es decir, que en primer lugar como socialistas y de izquierdas nunca agotaremos la vía del diálogo y si ésta una y otra vez nos falla, lo trasladaremos a todos nuestros órganos internos para que el diálogo y el debate sea la única opción por lo tanto, este argumento para dimitir a mí personalmente, no me es válido. En cuanto a la inactividad orgánica, “¿no sé?…. ¿a ver?… esperen que piense un poco…. ¡Ah! ¡Ya se me ocurrió! ¿No será que tenemos muchas dificultades para gobernar en nuestro día a día por la situación política y económica de nuestro país y entonces tenemos que disminuir las actividades del partido? Creo que sería bueno apelar a la comprensión entre compañeros. Y del diálogo institucional… ¡Por favor! ¡Mejor ni hablar! Por qué ya es bastante vergonzoso ver como airean los asuntos de nuestro partido tan alegremente, pudiéndolos resolver en “casa”, como para tocar las instituciones que son de todos los ciudadanos ¡Pido por favor, respeto a la ciudadanía en general, y sepan estar!

Ya para terminar, y por si acaso no tienen quehacer…, les digo que hay una listado larguísimo e infinito de cosas importantes en las que trabajar: el embellecimiento del casco antiguo de la capital de La Gomera, la concienciación de respetar el medio ambiente promoviendo turismo de calidad y sostenible en todos nuestros municipios para que la economía insular crezca, la creación de empleo joven y de sectores de población de difícil inserción , la atención a la dependencia, las necesidades de menores y familias, la educación y la sanidad, las energías renovables, etc, ¿Sigo? Por eso digo: ¡dejen el “jueguecito”! Porque no veas la imagen de “pacotilla” que estamos dando y eso sin contar las herramientas de regalo a la oposición. ¡Paren a pensar y reflexionen! Se lo deben a la ciudadanía y al resto de socialistas.
Con cariño; Una compañera.