Ralf Zinke: Pido al Presidente del Cabildo y al Alcalde de San Sebastián que aclaren públicamente sus imputaciones
En los últimos meses se han multiplicado las noticias acerca de algunos casos graves de imputaciones sobre supuestos casos de corrupción e irregularidades en la concesión de licencias de obras.
Resulta curioso que en estos precisos momentos se publiquen tantas cuestiones para perjudicar a los adversarios políticos. Esto significa claramente que no se puede tener confianza en ningún partido tradicional, si no cambian su estructura hacia una mucha mayor transparencia, y aplican un código ético riguroso. Sin la aplicación de estas medidas, nunca se podrá resolver el problema de la corrupción y del abuso de poder.
Llama poderosamente la atención que ahora se publican asuntos que llevan años siendo investigados.
Parece obvio que su publicación ahora, así como la aceleración de su investigación, no estén motivados por el interés de ejercer justicia sino para perjudicar a los “amigos íntimos” políticos. La decisión de Ferraz de no admitir Casimiro Curbelo como candidato del partido para las próximas elecciones, fue por gran parte motivada por la “guerra interna” de los compañeros.
No acepto que, de forma absolutamente descarada, dentro del PSOE se taparon unos a otros durante muchos años diversas actividades supuestamente al margen de la ley y de repente, cuando quieren liquidar a sus rivales internos del partido, reclaman la aplicación de las normativas, pero eso sí, a los supuestos delitos e irregularidades del otro.
En este sentido hay que distanciarse de publicaciones tendenciosas del tipo: “y tú más”. Este comportamiento es un insulto para una democracia moderna.
Exijo tanto al Presidente del Cabildo como al Alcalde de San Sebastián, que aclaren públicamente sus imputaciones y todos los aspectos relevantes. No es de recibo que nuestros representantes políticos nos presentan, prácticamente todos los días, sus "buenas noticias", y respecto de las investigaciones judiciales sobre algunos casos de supuesta corrupción, con mucho interés público, al final no nos aclaran nada.
Tenemos que trabajar por la renovación democrática de La Gomera. Tenemos que obligar a nuestros políticos la aplicación de un riguroso código ético para suspender la militancia en caso de imputaciones por delitos graves (malversación, corrupción, robo de caudales públicos o engaño a hacienda,…). También es necesario que los partidos políticos establecen formas respetuosas de concurso político.
La democracia es una joya que tenemos que proteger entre todos. No debemos aceptar que unos pocos actores políticos ensucian la imagen de otros que sí son honrados, independientemente del partido al que pertenezcan. No importan las siglas de los partidos, sí importa el trabajo que tienen que hacer y el servicio que todos los políticos tienen que prestar a la ciudadanía.