El 48 Cumpleaños de Tono
Bueno Tono hoy cumples un año más, cómo pasa el tiempo...
Recuerdo cuando naciste como si fuera hoy mismo.
Tanto tu padre como yo deseamos que ese regalo que siempre pido por tu cumpleaños, al fin se pueda conseguir.
Y no es otro que el día que tu padre y yo ya no estemos te puedas quedar en tu casa, rodeado de tus cosas y que no te falte tu bienestar y todos los cuidados que como cualquier persona necesitamos para tener una vida digna y donde prime el respeto y tu autodeterminación.
Un año más que cumples y un año menos que nos queda a tu padre y a mí para estar a tu lado...y eso duele mucho...
Tú sabes que mientras estemos aquí nada te va faltar. Hoy celebramos un año más de tu vida y paradojicamente un año menos de la nuestra para estar contigo.
Tono, la vida es como un gran trayecto que hacemos en tren y tanto tu padre como yo lo que queremos es acompañarte en este viaje el tiempo máximo posible; que el viaje sea muy largo y con muchas paradas para seguir a tu lado hasta que por ley de vida nos toque apearnos y dejarte seguir el trayecto solo.
Yo siempre pido prorrogas a la vida pero claro, hay un límite por cada persona y me temo que las nuestras no tardaran en agotarse. Para cuando eso suceda recuerda lo mucho que te queremos y que siempre desde donde quiera que estemos velaremos por ti.
Cuando te sientas solo (a todos nos pasa muchas veces) mira al cielo y verás que entre todas las estrellas del firmamento hay dos que brillan mucho más, porque esas estrellas somos tu padre y yo que te estamos enviando nuestra energía y nuestra luz para acompañarte siempre.
Hoy celebraremos tu cumple como tú mereces porque eres lo más auténtico, simpático y marchoso que puede haber.
Tono, yo también quiero pedir un deseo cuando soples las velas, dicen que no se puede decir el deseo en voz alta porque no se cumple, pero lo voy a pedir igual...Mi deseo es que cuando ya no estemos, las personas que se vayan hacer cargo de ti ¿? tengan en cuenta que depositamos en sus manos el mayor tesoro que tenemos tu padre y yo, ese tesoro de incalculable valor eres tú y espero que te traten como si de un hijo, hermano, o padres propios se tratara.
Llegó el momento de hacer lo que fuimos posponiendo durante años pero ahora por razones obvias hay que afrontar, y es dejar bien atado tu futuro, aunque es doloroso para nosotros eso pasa a segundo plano.
Llegó la hora de lo prioritario, porque tú eres nuestra máxima prioridad y pensando en tu bienestar haremos todo lo que esté en nuestras manos para que tu futuro sea lo más confortable posible.
¡Muchas Felicidades cariño!
Te queremos mucho