El timo de la estampita de la política es que los ciudadanos sigan siendo fieles a unas siglas en las que cada dos por tres se dan extraños maridajes.

Tras el anuncio por parte de José Manuel Soria del enlace con el CCN, pasando por vicaria y con el correspondiente estampado de firma en el contrato marital..., muchos en esta isla  comienzan a hacer sus cábalas sobre quienes serán los cabezas de lista por el Senado y al Congreso de los Diputados.

 Como su ele ocurrir en esta tierra redonda en la que el silbo lanzaba al aire los mensajes  en la que alguno llegaba tergiversado ya fuere por la bruma, lo escarpado del terreno o la necesidad de generar cierta polémica, desde esos tiempos pretéritos como decía, aún silbando ,al chisme se le añadía alguna sílaba más, y eso quieran o no le daba cierto atractivo.

Bueno ahora con las nuevas tecnologías,si bien la conversación llega antes, no es menos cierto que lo hace igual de maquillada que antaño, solo que con mayor dosis de intención, mala uva y prestada a crear confusión u enredo.

Pero...  para no divagar mas e irnos por los cerros de Agando, vamos pues al meollo del asunto que hoy nos ocupa, los pactos pre-electorales y  mas concretamente el suscrito por Gavioteros y Naranjos (dicho esto con todo el sentido del humor y sin pizca de acritud) es el rumor extendido por los cuatro cantones de la Ínsula del Conde (mas en el de Mulagua) en la que el silbo habla de la posibilidad de que la cabeza de lista por el senado sea precisamente la que antes era Roja , ahora Naranja y mañana quien sabe si Gaviota.

Parece ser que este ,en principio bulo, no ha sentado nada bien en las filas Peperas gomeras y menos en las de Hermigua, que no ven con buenos ojos como después de la brega que se han dado algunos en el campo del Partido venga una de fuera y recoja la cosecha.

A todo esto hay que añadir que de momento no sabemos que información coteja el jefe de los Azules de la Gomera (Javier Trujillo) y si sera cierto que la primera dama  del valle del "todo por descubrir", le usurpe el puesto por aquello de la cortesía hacia las féminas, aunque no se porque... me parece que para subir unas escaleras o ceder un sitio en el Bus puede, pero ceder el mullido sillón del Senado son palabras mayores por muy féminas que sean las ídem, máxime cuando Javier se sabe el Resucitador de la esperanza de los conservadores insulares.

Tampoco creemos que el ahora recién nombrado presidente de los populares este dispuesto a ceder terreno toda vez que se ha dado una dura tarea en las labores de poner en vanguardia un partido que ha permanecido inerme durante varios lustros.De todas maneras y volviendo con la presunta "candidata", no me extraña, y valga la broma, de que sólo tenga una fidelidad garantizada en este país, el compromiso de permanencia a las compañías de telefonía móvil. Divorciarse está tirado y cambiar de corporación en menos que canta un gallo, mucho más. Y en el caso de Solveida Clemente todo es posible.Se han visto cosas mas extrañas...