El que tantas noches diera, como LOCO DE LA COLINA; el que nos conmoviera, sin saber ni quién era, anda hogaño a la deriva.

Una voz cautivadora, que penetraba en la entraña; de mirada encantadora y, presencia seductora, valorada en toda España.

En los “Ratones Coloraos”, se engrandeció su figura y, quedamos encantados, por los tantos retratados, con precisada estructura.
Su magnética entrevista, sonsacaba lo más crítico y, nos ponía a la vista, los anhelos del artista y el sentir de algún político.

Variedad de gerifaltes, desfilaron por cabeza y, sacaba de cualquier parte, al humilde personaje, encubierto en la pobreza.
Propietario de un Teatro, el escenario enfocó y, con su fraternal trato,lograba el mejor contrato que, a la fama, le encumbró.

Figura tan popular, no se debe de perder. ¡Que logre al fin retornar, para hacernos disfrutar, en la Ciencia del Saber.

En las vueltas de la vida, la ruleta, no se para ¡Para abajo, para arriba, caminando a la deriva y, encubriéndose la cara!
De entre muchos predilectos, casi siempre, fue el primero. ¡Los programas perfectos, mostrando los sentimientos, del señor, JESÚS QUINTERO!