“Un Político pierde el norte cuando se encierra en su Castillo de Cristal, y deja de escuchar a los ciudadanos y a partir de aquí el único camino que le queda es una deriva hacia posiciones autoritarias y dictatoriales con enfrentamientos dialécticos y consecuente enemistad con los ciudadanos”

Como cada domingo, y tras haber dado cuenta a una buena taza de café mas que nada para espabilar  este cuerpo mio bastante adentrado en años, me senté frente al ordenador para comenzar eso que llaman “navegar por la red” en busca de las noticias , opiniones y artículos diversos.

Aunque distante de mi isla natal siempre intento mantenerme al tanto de lo que a diario ocurre y también, porque no decirlo, con mis opúsculos que algunos diarios tienen a bien publicar, ser parte activa de la población.

Pero para no divagar y entrar de lleno en el meollo del asunto, confieso que ese día, y tras encender mi ordenador  y leer la “Encíclica Dominical” del  señor presidente del Cabildo gomero, pensé por unos instantes que mis cansados ojos me habían hecho una mala jugada y que lo que yo creía leer era justo lo contrario de lo que escrito estaba.

No acierto a contar las veces que me frote  los ojos en la esperanza que al volverlos a fijar en la editorial de Curbelo, sus palabras expresadas en el, cobrasen sentido y concordasen con lo que realmente ha sido su actitud frente a los ciudadanos desde que gobierna el cabildo o mejor dicho la Isla.

Reparé en la frase con la que doy comienzo a mi opinión y me dije: “Hay que ser desmemoriado o tener la cara mas dura que el pedernal para soltar tamaña falacia y quedarse mas ancho que alto”.

No se si Don Casimiro revisó personalmente esta opinión suya antes de ser enviada a los medios porque en caso de que lo haya hecho, creo que no ha tenido en cuenta que en la Isla, “su roca”, cada vez quedan menos personas que crean que su Gobierno se ha sustentado sobre la premisa de “escuchar a los ciudadanos”, más bien diría yo, de espiarlos y averiguar que se dice de su persona para confeccionar “su lista negra”. Decir esto, alguien al que se le achaca entre otros hechos más parecidos a los de un dictador que un demócrata, como el de “secuestrar la prensa escrita” y presionar a los medios insulares, es poco menos que de contrasentido o el de intentar tapar las verdades con una “mentira”,  que por lo tan evidente resulta hasta insultante.

“Por ello lo mejor para evitar los vicios autoritarios que causa gobernar a veces equivocadamente es recurrir a la cordura y a una cura de  humildad antes de llegar a causas mayores lo que traería enfrentamientos sin necesidad a ello”

Esta es otra de las frases que aún hoy, y dos semana después de leerla, me cuesta digerir, más que nada porque conociendo su trayectoria política, en muchos de los casos en los que se le han pedido explicaciones, precisamente la humildad no ha sido la tónica de Curbelo.

Dice una frase de autor anónimo que “la vida es igual que una obra de teatro, la única diferencia es que la vida es un estreno continuo y no puedes corregir los errores”; yo añado que lo único es enmendar para no volverlos a cometer. Pero si cada vez que se presentan las previas a las elecciones es cuando nuestros gobernantes hablan de cambiar su “Modus operandi”, permítanme que tire de expresión canaria y grite aquello de: “guárdenme un cachorro de la próxima camada” .