El senador socialista por La Gomera, Gregorio Medina se ha sumado a la solicitud realizada por 64 parlamentarios de la Cámara Alta a la Mesa de esta Institución para que se promueva un acuerdo para la creación de una Comisión Especial de Estudio sobre trabajo y explotación infantil en el mundo y la comercialización y el consumo en España en relación con esta realidad. 
Medina, que recuerda que la iniciativa se lleva a cabo a propuesta de su Grupo Parlamentario, señala que los “firmantes estamos completamente convencidos de que el Senado puede realizar una tarea útil en la determinación del problema y la ayuda a la generación de una conciencia ciudadana en estas materias de acuerdo con la demanda de los organismos internacionales que se ocupan de este grave problema mundial”. 
El Senador apunta que la solicitud de creación de la Comisión mencionada, se inspira en estos momentos por la reciente concesión del Premio Nobel de la Paz al indio Kailash Satyarthi, que “ha vuelto a poner el tapete de la conciencia internacional el drama de la explotación infantil”. Su ONG, Bachpan Bachao Andolan, ha rescatado a más de 80.000 niños que se encontraban trabajando, en muchas ocasiones en condiciones deplorables. 
Medina considera que los senadores firmantes “estamos plenamente convencidos de las graves circunstancias que rodean los casos de explotación infantil en el mundo, donde según UNICEF, empresas que recurren a la mano de obra infantil, siempre más barata y donde existen gobiernos y autoridades permiten la explotación de 158 millones de niños y niñas de entre 5 y 14 años en condiciones de peligro”

Cabe recordar que UNICEF define el trabajo infantil como cualquier trabajo que supere una cantidad mínima de horas, dependiendo de la edad del niño o niña y de la naturaliza de la labor que se realice. Ello se considera perjudicial para la infancia y por tanto debería eliminarse. 

La iniciativa parlamentaria señala que “con independencia de que se pueda considerar que en nuestro país, más allá de casos que seguramente serán aislados y que son perseguidos por nuestros sistemas de inspección para una eficaz protección laboral, lo cierto es que, como reclama la OIT, en un mundo globalizado el fenómeno del trabajo infantil no nos es ajeno. 
Medina insiste en uno de los principales apartados de la iniciativa parlamentaria: “Desde luego no nos puede ser ajeno desde una perspectiva ética o moral y tampoco desde la perspectiva económica. De ahí que desde los organismos internacionales se apele a la cooperación para combatir este grave problema”.