La neumonía sigue siendo la primera causa de mortalidad infantil
BALTIMORE, MARYLAND - Con motivo de la conmemoración del cuarto Día Mundial de la Neumonía, hoy 12 de noviembre, expertos de todo el mundo y la Coalición Mundial contra la Neumonía Infantil han solicitado mayores esfuerzos en la lucha contra la neumonía infantil, que sigue siendo la principal causa de muerte de niños menores de cinco años. La neumonía provocó 1,3 millones de muertes de niños en 2011, y fue responsable de la muerte de casi uno de cada cinco niños.
"La neumonía puede prevenirse y curarse. Sin embargo, desde hace mucho tiempo es la principal causa de mortalidad infantil en el mundo. Sabemos qué hacer, y hemos logrado un avance importante, pero tenemos que hacer más. Debemos aumentar los tratamientos y asegurarnos de que llegan a todos los niños que los necesitan", ha dicho el Secretario General de la ONU Ban Ki-moon, quien encabeza la iniciativa Cada Mujer Cada Niño, un movimiento que ha logrado destinar más de 20.000 millones de dólares (15.726 millones de euros) a favor de la salud de mujeres y niños, y cuyo objetivo es salvar 16 millones de vidas en 2015.
Las inversiones realizadas en prevención, tratamiento y protección de los niños contra la neumonía han contribuido a disminuir de manera significativa la mortalidad infantil durante la última década, pero el acceso a servicios sanitarios y tratamientos sigue estando fuera del alcance de muchos niños de países en desarrollo, donde se produce el 99 por ciento de las muertes por neumonía. Según la Coalición Mundial contra la Neumonía Infantil, los líderes y donantes deben priorizar los esfuerzos y las inversiones en intervenciones de eficacia demostrada, como el suministro de vacunas y de tratamientos con antibióticos adecuados, así como la mejora del saneamiento, la promoción de prácticas como la lactancia materna exclusiva, el lavado frecuente de manos, la atención adecuada y el uso de aparatos destinados a limpiar el aire contaminado del interior de las casas. Varias de estas intervenciones también ayudan a tratar la segunda causa de mortalidad infantil: la diarrea.
Los antibióticos como la amoxicilina son uno de los métodos más sencillos y baratos para combatir la neumonía. Sin embargo, se administran antibióticos a menos de un tercio de los niños con síntomas de neumonía, y sólo una pequeña minoría recibe la amoxicilina de la manera indicada para niños pequeños: un comprimido que se disuelve en una cantidad muy pequeña de líquido o leche materna. Según la Comisión de la ONU sobre suministros vitales para mujeres y niños, administrando amoxicilina en forma de pastillas solubles a los niños que se encuentran en riesgo de muerte, se podría evitar la muerte de aproximadamente 1,56 millones de niños mayores de cinco años.
Según el Informe de Progreso de la Neumonía difundido hoy por el Centro Internacional de Acceso a Vacunas (IVAC por sus siglas en inglés) de la Universidad Johns Hopkins, el 75 por ciento de todas las muertes de niños provocadas por neumonía se producen en sólo 15 países, lo que demuestra el impacto que puede tener la concentración de esfuerzos. El informe también señala que ninguno de estos países ha alcanzado el 90 por ciento de cobertura de intervenciones clave contra la neumonía, como recomienda el Plan de Acción Global para la Prevención y Control de la Neumonía (GAPP por sus siglas en inglés).
El plan GAPP, publicado en 2009 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) señaló que se podrían reducir dos terceras partes de las muertes de niños si se llevasen a cabo tres intervenciones en salud infantil en el 90% de los niños del mundo: lactancia materna, vacunación y atención adecuada, que incluye la administración de antibióticos.
En los tres últimos años, la Alianza GAVI ha apoyado a más de 20 países en la introducción de la vacuna neumocócica conjugada, que evita la principal causa de neumonía infantil. Si bien se han producido avances, en la actualidad sólo 7 de los 15 países analizados en el informe del IVAC tienen niveles de cobertura de vacunación situados en el 80% o por encima. La cobertura referente a la lactancia materna o el acceso a antibióticos es igualmente baja en la mayoría de los países.
La clave para conseguir que las vacunas y los tratamientos lleguen a los niños que más los necesitan es hacerlos llegar a través de los trabajadores sanitarios, ya que para muchos niños son el primer, y a menudo único, cuidado sanitario que reciben. Sin embargo, la OMS estima que actualmente hay un déficit de por lo menos un millón de trabajadores sanitarios de primera línea, especialmente en África y algunas zonas de Asia. Iniciativas como la campaña Cada Latido Cuenta, de Save the Children, está llamando la atención sobre esta escasez de profesionales, lo que anima a atajar el problema.
El cuarto Día Mundial de la Neumonía se va a conmemorar en casi una docena de países, como Argentina, Burkina Faso, Camerún, Costa de Marfil, Ghana, Haití, India, Nigeria, Filipinas, Estados Unidos y Zambia. En EE.UU., los monumentos históricos de 15 ciudades van a ser iluminados con luces azules para concienciar sobre los efectos de la neumonía en la infancia y para informar sobre cómo pueden ayudar los ciudadanos. Algunos edificios participantes son el Edificio Wrigley (Chicago), las Torres Trump SoHo (Nueva York) y el Centro Científico del Pacifico (Seattle), entre otros. Para obtener más información sobre el Día Mundial de la Neumonía y las actividades previstas, visite www.worldpneumoniaday.org.
La Coalición Global contra la Neumonía Infantil fue creada en 2009 para generar conciencia sobre las consecuencias de la neumonía, la principal causa de mortalidad infantil en el mundo, y para abogar por una acción global destinada a proteger, tratar con eficacia y prevenir esta enfermedad mortal. Compuesta por más de 140 organizaciones no gubernamentales, organizaciones de la sociedad civil, instituciones académicas, agencias gubernamentales y fundaciones, la Coalición lidera el Día Mundial de la Neumonía, conmemorada cada 12 de noviembre.