Alberto Díaz Pinto.- De vez en cuando, los medios de comunicación se hacen eco de algún suceso relacionado con desapariciones, secuestros o violaciones de adolescentes, sobrecogiéndonos ante la idea de que podría haberle pasado a alguno de nuestros hijos. Muchos pedófilos y pederastas suelen utilizar las redes sociales como herramienta de contacto para acercarse poco a poco al menor, sin levantar ningún tipo de sospecha.

Y es que actualmente la mayoría de los adolescentes utilizan las redes sociales con bastante asiduidad pero, ¿cómo de expuestos están?. El experimento social que veréis a continuación, demuestra lo fácil que es llegar hasta el menor a través de este tipo de canales.

Con un perfil falso y una conversación amable durante unos cuantos días, el protagonista no tardó en ganarse la confianza de las niñas e incluso hizo que abandonasen sus hogares para reunirse con él, a pesar de ser un completo desconocido para ellas. Sus padres, partícipes del experimento en todo momento, no podían dar crédito ante la idea de que sus hijas hubiesen sido engañadas tan fácilmente, así que decidieron darles una lección que no olvidarán jamás.