Jornada de alegría y satisfacción para muchas familias de Vallehermoso que vieron como, por fin, la escuela infantil de Vallehermoso volvía a abrir de nuevo sus puertas tras más de cinco años de cierre.

En el acto de reapertura el alcalde de Vallehermoso, Emiliano Coello, se mostró satisfecho tras cumplir el Grupo de Gobierno con el compromiso dado a los vecinos de hacer realidad la puesta en marcha de este centro, que da respuesta a la problemática de falta de plazas que presenta este municipio. Todo ello, con una inversión municipal que ronda los 50.000 euros y que será gestionada a través una asistencia técnica externa.

Por su parte, la directora general de infraestructuras educativas del Gobierno de Canarias, Ana Dorta, aseguró que hoy es un gran día para la localidad ya que se pone en marcha un recurso muy útil, que permitirá a las familias conciliar la vida laboral y familiar.

Así, las renovadas instalaciones volvieron a acoger actividad desde primera hora, con la presencia de los primeros niños en el centro, quienes pudieron estrenar los nuevos espacios que ofrece la escuela. Una jornada donde además los padres pudieron conocer, de primera mano, cuál va a ser el funcionamiento del centro y el periodo de adaptación previsto para los más jóvenes.

También sirvió para conocer el personal que desarrollará la labor en la escuela infantil y que estará compuesto por cuatro personas, todas ellas del municipio.

En este sentido, la concejala de Servicios Sociales, Vanessa Hernández señaló que, en cuanto al número de usuarios de las instalaciones, “iniciamos la actividad con diez niños, pero con previsión para alcanzar los quince en las próximas fechas”. “Un espacio que permitirá dar tranquilidad a los padres y madres, que podrán continuar con sus compromisos profesionales sintiendo la tranquilidad de saber que su hijo está en buenas manos”, destacó.

Cabe recordar que fue en el mes de septiembre cuando se finalizaron los trabajos de mejora de la instalación y que han permitido habilitar un patio exterior abierto, con más de 50 m2, y con suelo de seguridad para evitar las caídas de los niños. Además, se ha procedido a cambiar la distribución interior del patio de juegos, diseñando un espacio más diáfano y moderno, así como la modificación del aula destinada a los bebés con mayor amplitud y cumpliendo con la normativa vigente, además de la adecuación del cambiador equipándolo con sistema de ducha.