Sí se puede La Gomera ha comunicado por escrito al Ayuntamiento de Valle Gran Rey, la detección de evidencias de que existen ejemplares de palmeras canarias afectadas por enfermedad vascular o similar.

En palabras de Sandra Ramos Martín, portavoz del comité local de Sí se puede en Valle Gran Rey, «tanto en El Guro como en Casa de la Seda y Las Orijamas existen ejemplares que muestran evidentes síntomas de algún tipo de enfermedad vascular. En el caso del ejemplar de la Casa de la Seda, ya ha perdido toda la corona y puede que responda más a un envenenamiento que a una enfermedad». 

Desde la formación ecosocialista se señala que «nos preocupa que los ejemplares enfermos estén a cierta distancia y no localizados en un solo foco, porque quizás sea un síntoma de que sólo estemos ante el principio de una afección mayor que esté extendiéndose por el palmeral de Valle Gran Rey».

El comité local ha entregado los correspondientes avisos ante el Ayuntamiento de Valle Gran Rey, y espera que desde la Corporación Municipal se hayan activado los protocolos correspondientes de aviso al Cabildo Insular y al Gobierno de Canarias.

«Con la presencia de picudo negro en palmeras en San Sebastián, nos preocupa además que esta plaga se introduzca en Valle Gran Rey y afecte a nuestro palmeral. Se han hecho recientemente plantaciones de palmeras en las obras del encauzamiento del barranco, de la Calle Vueltas y en jardineras de algunas vías de la zona baja, y esperamos que se hayan llevado a cabo los controles fitosanitarios establecidos. Lo que sí estamos viendo es que en las podas que hace el propio Ayuntamiento no se siguen las directrices técnicas que dispone el Gobierno de Canarias» advierte Ramos. 

El palmeral de Valle Gran Rey es uno de los más importantes de La Gomera y es un rasgo definitorio del paisaje del valle, e incluso es uno de los símbolos que aparecen en su escudo. Por lo tanto, según la portavoz «la responsabilidad del cuidado de esta especie es de todos y precisamente por este compromiso es que Sí se puede quiere evitar la extensión de las posibles enfermedades que se detectan en estos ejemplares».

En el mismo sentido, desde el Comité Local se pide que se esclarezcan lo antes posible los envenenamientos de palmeras acaecidos tras el incendio de agosto de 2012, para evitar que se caiga en la impunidad de tan repudiable atentado contra el patrimonio natural del municipio. «Según dijeron, al menos 122 ejemplares murieron de forma intencionada por la mano del hombre a través de sustancias tóxicas, y esto debe traducirse en algún tipo de responsabilidad», se insiste desde Sí se puede.