La selección española de fútbol escribió este miércoles en Ucrania un capítulo más de su triunfal historia reciente al certificar su clasificación para la final de la Eurocopa de 2012 frente a Portugal en la tanda de penaltis, después de que no hubiera goles en los 120 minutos de partido. Las dos selecciones, muy ordenadas en defensa pero con pocos recursos en ataque, se repartieron las ocasiones hasta la prórroga, donde sólo España hizo méritos para romper la igualada. No lo consiguió, pero los penaltis le brindaron la oportunidad de hacer historia el próximo domingo, ante Alemania o Italia. Con una victoria, sería la primera selección en encadenar tres títulos internacionales de forma consecutiva.

Una vez más, Del Bosque sorprendió con su alineación. Esta vez el ‘nueve’ no fue Torres, ni Cesc, ni Fernando Llorente. Negredo, quien incluso era menos favorito que el ‘descartado’ Soldado para entrar en la lista de la Eurocopa, fue el elegido para ocupar la punta del ataque español en las semifinales.

Toni Grande, el ayudante del salmantino, explicó a Telecinco antes del partido que el vallecano era el elegido porque era el adecuado para “pelear con dos centrales grandes, defender los balones aéreos, y aportar potencia y fortaleza”.

La inclusión de Hugo Almeida en el ataque portugués en lugar del lesionado Helder Postiga fue la novedad respecto al partido de cuartos en el once luso, que comenzó el encuentro imponiendo un ritmo muy alto y avisando de que no se encerraría atrás.

Sólo había pasado un minuto cuando Veloso, desde el córner, estuvo a punto de sorprender a Casillas y lograr un gol olímpico, pero el capitán español resolvió bien el primer escollo. España no comenzó mal, pero a los de Del Bosque les costaba superar la línea de centrocampistas de su rival.

Una gran jugada de Iniesta, que culminó Arbeloa con un disparo alto fue la primera llegada de España, mientras que Cristiano apareció a los doce minutos con su primera internada por la izquierda.

Los dos conjuntos, muy encorsetados, anulaban a su rival. El balón era de España, pero sólo Iniesta, con sus ráfagas de genialidad con acciones individuales, amenazaba a los de Paulo Bento. Cristiano Ronaldo, a la media hora, volvió a avisar con un tiro raso que salió fuera por poco tras una pérdida de balón de Jordi Alba.

Las presiones de las dos selecciones causaban estragos. La de Portugal, en el centro del campo, anulaba el tiqui taca de la ‘Roja’. La de España, obligaba a Rui Patricio a recurrir al balón largo una y otra vez.

En la segunda parte nada cambió, o mejor dicho, se incrementó la sensación de que los dos equipos estaban más preocupados de defender que de atacar. Los minutos pasaron en un suspiro. Dos lanzamientos de Xavi, uno alto y otro a las manos de Rui Patricio, fueron lo único reseñable en un conjunto español que sólo pasó apuros con tres libres directos que Cristiano, escuchando gritos de ¡Messi, Messi!, lanzó desviado.

La entrada de Cesc y Navas no sirvió para cambiar el decorado de un encuentro que se encaminaba hacia la prórroga. Pedro sustituyó a Xavi a cuatro minutos del final, poco antes de que Portugal disfrutara en el último suspiro de una contra que parecía decisiva. Pero Cristiano mandó su remate a las nubes y España continuó viva.

España mereció el triunfo en la prórroga

El tiempo extra era una incógnita en cuanto al fondo físico de los dos equipos. Portugal había corrido más kilómetros detrás del balón, pero había gozado de dos días más de descanso. Por otro lado, había guardado dos de sus tres cambios y España había realizado ya las tres sustituciones.

La teórica superioridad física de los portugueses no se notó en la primera parte de la prórroga, todo lo contrario. Con Cesc, Pedro, Navas e Iniesta muy participativos, la ‘Roja’ fue la única que buscó el gol y tuvo dos opciones. La primera, con un disparo de Iniesta que repelió Rui Patricio y la segunda, con un libre directo de Sergio Ramos que salió rozando el larguero de la portería lusa.

En la segunda parte, en la que Custodio saltó al césped a anular a Iniesta -el mejor del partido-, también fue España la única que hizo por marcar. Un tiro de Navas que rechazó el portero portugués y un contragolpe en el que Pedro se entretuvo fueron las oportunidades de la campeona del mundo.

Llegaban los penaltis, para muchos, una lotería. Aunque tener al mejor portero del mundo en tu equipo debe dar tranquilidad. Incluso cuando Rui Patricio detiene el primer penalti lanzado por Xabi Alonso. Pero Íker, San  Íker, el ‘Santo’ o como le quieran llamar, ahí estaba para igualar las cosas a continuación.

Iniesta, Piqué, Pepe y Nani, no fallaron y llegó el momento de Sergio Ramos, enfrentado a sus ‘fantasmas’ que recordaban su fallo ante el Bayern. Habría sido injusto que el sevillano no hubiera tenido suerte tampoco esta vez y fuera recordado por un nuevo error. Pero demostró una tremenda personalidad y marcó… ¡a lo Panenka! Genio y figura.

Bruno Alves estrelló su remate en el larguero y el que apareció para lanzar el último fue Cesc. Parecía la imagen de hace cuatro años, cuando el catalán acabó frente a Italia con el mal fario de España en cuartos de final. Como en 2008, le susurró al balón que no le fallara, que había que volver a hacer historia. Y el balón no le falló. España ya espera rival en la final. Señores, están viviendo algo histórico. Sean conscientes de ello.

PORTUGAL 0-0 ESPAÑA

PORTUGAL: Rui Patricio; Joao Pereira, Bruno Alves, Pepe, Coentrao; Veloso (Custódio, min.105), Moutinho, Meireles (Varela, min.112); Nani, Ronaldo, Almeida (Oliveira, min.81).

ESPAÑA: Casillas; Arbeloa, Piqué, Ramos, Jordi Alba; Busquets, Xabi Alonso, Xavi (Pedro, min.87); Silva (Navas, min.60), Iniesta; Negredo (Cesc Fábregas, min.53).

GOLES: -Tanda de penaltis. 0 – 0, Xabi Alonso, falla. 0 – 0, Moutinho, falla. 1 – 0, Iniesta, gol. 1 – 1, Pepe, gol. 2 – 1, Piqué, gol. 2 – 2, Nani, gol. 3 – 2, Sergio Ramos, gol. 3 – 2, Bruno Alves, falla. 4 – 2, Cesc Fábregas, gol.

ÁRBITRO: Cuneyt Cakir (TUR). Amonestó con tarjeta amarilla a Sergio Ramos (min.41), Busquets (min.60), Arbeloa (min.84) y Xabi Alonso (min.114) en España; y a Coentrao (min.45), Pepe (min.61), Joao Pereira (min.64), Alves (min.85) y Veloso (min.93) en Portugal.