Sanidad ha impartido de madrugada un cursillo express sobre el ébola a 40 trabajadores del hospital Carlos III
Se ha instalado un laboratorio de emergencia en el centro para analizar de inmediato las pruebas médicas que se le realicen al padre Miguel Pajares infectado por el virus y evitar que se propague
Confidencial Digital.-Sanidad ordenó la realización de una formación express al personal del hospital Carlos III que se va a encargar del tratamiento del sacerdote español infectado en Liberia por el virus del ébola. El cursillo fue impartido esta misma madrugada por especialistas del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de La Paz, a pocas horas de la llegada al centro del padre Miguel Pajares.
Fuentes hospitalarias, a las que ha tenido acceso El Confidencial Digital, confirman que en este cursillo han participado alrededor de 40 profesionales del hospital Carlos III de Madrid, entre médicos, enfermeras y celadores.
En síntesis, el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de La Paz instruyó, con urgencia y de madrugada, a los facultativos en los siguientes protocolos de emergencia:
– Retirada de los equipos y monos, teóricamente contaminados y altamente infecciosos para evitar la propagación del virus.
– Traslado interno del paciente por el centro sanitario
– Medidas de protección individual de los propios facultativos
– Qué tipo de pruebas diagnósticas precisan estos pacientes
– La manera de desinfectar el material usado
Laboratorio para analizar las pruebas de inmediato
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican también que se ha instalado un laboratorio de emergencia en la planta sexta del hospital.
Allí serán analizadas todas las pruebas médicas que se le practiquen al enfermo, sin necesidad de transportarlas a otras dependencias sanitarias por el riesgo de que el virus pudiera expandirse.
El hospital Carlos III de Madrid ha recibido esta mañana al religioso Miguel Pajares, el primer español contagiado de ébola, y la misionera Juliana Bohi, que aterrizaron en la base de Torrejón de Ardoz.
El estado del padre Pajares se ha agravado en las últimas horas, le han puesto suero y no se puede levantar.