Ayer leía esta frase: "Tanto la persona como la sociedad de la que forma parte están haciéndose, no están completas".
Miles de personas, en este país, continúan su recorrido contra la ELA. Son cientos los que comenzaron hace tiempo esta trayectoria sin retorno. Muchos se van sumando; algunos sin remedio, por desgracia. Otros buscando precisamente eso, remedio, antes de que sea demasiado tarde.
Leo en la prensa acerca de esa moción de censura que le planta el segundo del alcalde al propio alcalde ... y me pregunto "¿eso no es traición?". Pues no, parece que no. Todo depende de quien sea el traicionado.
No existe sensación más destructiva y reconfortante a la vez que descubrir que te engañan, que te han engañado y que pretendían seguir engañándote.
Desconozco si continua viva. Ya han pasado cinco años desde que la vi por última vez y en este 28 de noviembre, Día Internacional de Los "sintecho" me acordé de ella.
Noviembre, mes de añoranza, recuerdos y de vinos...En eso pensaba, recreando mis anhelos, mientras laguneaba, ya casi anocheciendo, sobre adoquines testigos del paso del tiempo.
A las puertas de una de las celebraciones más controvertidas de nuestro tiempo, nos dejamos seducir por el ritual de la magia en una de las noches más fúnebres del año, en la que se mezcla el respeto a lo desconocido con la celebración en nuestras mesas...
En doscientos años o quizás menos, las investigaciones, la ciencia, podría dar cuenta de la existencia de otras galaxias, de otras vidas más allá de la vida. Mientras tanto algunos se conformarían, sencillamente, con poder ir al supermercado.
Es necesario ayudar y atender al que lo necesita, por supuesto, y "atender a lo urgente que es importante y sin desatender lo importante que también es urgente"
"¡Libertad al pueblo saharaui! ¡Respeto a los Derechos Humanos de los refugiados de Tinduf! ¡Sahara Libre!"
En Cataluña las dos preguntas presentadas en diciembre de 2013 se realizarían en un principio en el marco de un referéndum, después este proceso se llamaría consulta, más tarde proceso participativo y, finalmente, no sé...
Como había quedado, aguardaba en la parada hasta que viniesen a buscarme...
...Y descubrió lo que algunos querían decir cuando hablaban de La Libertad. Fue justo allí, cuando metió los pies en aquel charco.
Uno de los chicos increpó a otro compañero, negro de piel, gritándole "por culpa de ustedes, los negros, ahora nos vamos a morir los españoles" y le empujó...
Ante mi un té ya frío, un puñado de piedras de recuerdos, un tiesto en el que crece la albahaca y, en mi pensamiento, mil cosas por hacer que no me atraen lo más mínimo...
Desde hace semanas circula entre los empleados de correos algo así como un bulo que les mantiene en alerta, máxime tratándose de la posibilidad de pasar a engrosar las listas del desempleo.
Me da un no sé qué en la boca del estómago (las madres diría mi bisabuela o los chakras revueltos según mi amiga, la coaching) sólo de pensar que ese vecino tan antipático o que esa señora tan pijotera puedan decidir mi futuro en Europa y solo por no ir yo a votar.
Es tremendamente penoso comprobar como cada uno va a lo suyo, sin "perder tiempo" en lo que suceda a los demás.
El 1 de mayo se celebra -por todo lo alto y con festivo incluido- el Día Internacional del Trabajador en un contexto en el que, al menos en nuestro país, el trabajo es uno de los principales problemas según los españoles: para unos porque no lo tienen y para otros porque teniéndolo, a veces, deben tragar con ruedas de molino para mantenerlo.
Doy ruido a este blog e intento reflejar en sus líneas el calvario que viven unos vecinos del barrio de San Matías, en Taco; para más señas en La Laguna.
No sé si es por la proximidad a las elecciones y miedo a quedarse en "stand by" lo que está provocando reacciones un tanto extrañas en distintas formaciones políticas, saltando al mundo mediático, con tal rapidez que nos cogen a casi todos con el paso cambiado.
No sé si es para alegrarse o no, según se mire. Lo cierto es que la "Savia de Palma" ya está en los lineales de los supermercados.
No se trata de posibles alergias al marisco, ni de efectos secundarios ni tan siquiera de componentes en mal estado, se trata simplemente de "esas" paellas.
Confieso que en el amanecer del Viernes Santo me dejé llevar por la emoción que fluía en mi tras la despedida a uno de los más grandes de la literatura en castellano.